Parece un AMG G63, pero no lo es. Es el especialista de Mercedes, Brabus, el que ha creado esta bestia para el desierto. Brabus prepara los Mercedes para llevarlos un paso más allá en cuanto a potencia y prestaciones. Y también en la puesta a punto del chasis.
1Sólo 15 unidades del Brabus 900 Crawler
Y con el Brabus 900 Crawler supera cualquier expectativa. Ha creado este exclusivo buggy, no homologado, para convertirse en el rey del desierto. Del Brabus 900 Crawler se fabricará en una serie limitada a 15 unidades, con un precio prohibitivo de 891.310 euros.
Exteriormente el Brabus Crawler parece un Mercedes Clase G transformado, con su frontal clásico, pero los únicos componentes que toma del modelo de la estrella son las ópticas de iluminación LED. La carrocería es completamente nueva, fabricada en fibra de carbono de alta calidad y basada en un chasis en escalera hecho a medida.
El Crawler no tiene puertas ni ventanas, dejando el interior totalmente expuesto a los elementos con un entramado de tubos de acero pintado en rojo como caja de seguridad. Como es habitual en Brabus, cuenta con anchos guardabarros, amplias tomas de aire de ventilación, también en el capó, luces LED montadas en el techo, alerón trasero de tipo «boy-racer» y tubos de escape laterales acabados en negro mate.
La característica más llamativa del Crawler es la enorme distancia al suelo de 530 mm, que es posible gracias a los amortiguadores ajustables en altura, los puntales de aluminio hechos a medida y las ruedas de gran diámetro.
Las llantas Brabus Monoblock HD de 20 pulgadas forjadas están calzadas con neumáticos todoterreno Maxxis Razr de alta resistencia. Incluyendo una rueda de repuesto de tamaño completo montada en la parte trasera. Los discos de freno están dimensionados a la altura de su brutal capacidad, siendo de 400 mm delante y 370 mm detrás, que es prácticamente el diámetro de las ruedas de un coche de serie.