En los últimos tiempos mucho hemos hablado de los chicos de Edmunds y de sus famosas carreras de tipo U-Drag. Sin embargo, en la inmensa mayoría de las ocasiones los protagonistas rebosaban kilovatios de potencia por los cuatro costados, mientras que estos Corvette Z06 y Mercedes-AMG GT 63 de lo que pueden presumir es de esconder poderosos motores V8 que renuncian a cualquier tipo de electrificación. Pura potencia que sacan a relucir a la hora de acelerar, aunque en esta competición también se valora la frenada y el paso por curva de ambas criaturas.
Criaturas que a pesar de compartir una genética V8, son en realidad polos opuestos a todos los niveles. Muestra de ello es que el Mercedes-AMG GT 63 coloca su bloque en el eje delantero, el cual además es biturbo, tiene tracción a las cuatro ruedas… Mientras que el corazón del Corvette Z06 está colocado en posición central, es atmosférico, tiene propulsión posterior… Incluso hasta en las transmisiones difieren, porque el americano se decanta por un cambio de doble embrague y 8 relaciones, mientras que el de Affalterbach apuesta por un cambio automático con convertidor de par y 9 velocidades.
El Corvette Z06 es más potente, más ligero y más barato que el de Affalterbach
Por si todo esto no fuera suficiente para diferenciar al Corvette Z06 del Mercedes-AMG GT 63, damos paso al peso. Mientras que el americano se conforma con 1.685 kilos, el alemán se va hasta los 1.922 kilos, ofreciendo así relaciones peso/potencia muy diferentes, como demuestran los 2,47 kg/CV del Corvette Z06 y los 3,28 kg/CV del Mercedes-AMG GT. A pesar de ello en la arrancada el deportivo de Affalterbach se adelanta de forma clara gracias a la capacidad de tracción de su sistema 4Matic+. Todo ello teniendo en cuenta que su 4.0 V8 Biturbo ha de conformarse con 585 CV de potencia, cifra inferior a los 680 CV que eroga el 5.5 V8 atmosférico utilizado por el de la firma de la pajarita.
Ahora bien, a final de recta las cosas siguen igualadas con el alemán a la cabeza. Pero toca frenar y aquí el menor peso del Corvette Z06 se impone, cosa que también ocurre a la hora de efectuar el giro, permitiendo que el americano salga mucho antes de cara a enfilar la meta. Y es que ambos modelos también difieren en su concepción, porque mientras que el Mercedes-AMG GT 63 no descuida la deportividad absoluta, también tiene un aire confortable, mientras que el Corvette Z06 es una criatura mucho más extrema… Y ‘barata’, porque en Estados Unidos se pueden comprar uno desde 124.375 dólares (119.485 euros), mientras que el de Affalterbach arranca al otro lado del océano en los 177.050 dólares (170.085 euros).
