El consejero delegado de SEAT y CUPRA, Wayne Griffiths, ha expresado una contundente opinión sobre el proteccionismo y los aranceles, argumentando que estas medidas obstaculizan significativamente la adopción del vehículo eléctrico, erosionan la confianza de los consumidores y, en última instancia, ponen en peligro el empleo en el sector automotriz. «El proteccionismo y los aranceles no funcionan», sentenció Griffiths durante la presentación de los resultados financieros de 2024.
La preocupación de Griffiths se centra en el impacto negativo que estas políticas comerciales pueden tener en la transición hacia la movilidad sostenible, un objetivo clave para SEAT, CUPRA y la industria automotriz en general. Los aranceles, al aumentar el precio de los vehículos eléctricos importados, dificultan su acceso a un público más amplio y frenan la adopción de esta tecnología.
Resultados financieros de SEAT en 2024: Un año de desafíos y oportunidades
Durante la presentación de resultados de 2024, donde también estuvo presente el vicepresidente Patrik Mayer, se reveló que SEAT obtuvo ganancias de 522 millones de euros, un 5% menos en comparación con el año anterior, según las normativas fiscales españolas. Esta ligera disminución se atribuye a la combinación de una mejora constante en los resultados de los últimos años y una reducción en el uso de créditos fiscales disponibles.
A pesar de esta leve caída, los resultados financieros de SEAT en 2024 demuestran la solidez de la empresa y su capacidad para generar beneficios en un entorno económico desafiante. La marca sigue apostando por la innovación y la electrificación para asegurar su crecimiento a largo plazo.
Aranceles al Cupra Tavascan: Un impacto millonario en la rentabilidad
Uno de los principales desafíos que enfrenta SEAT es la negociación con las autoridades europeas en relación con los aranceles aplicados al CUPRA Tavascan, un modelo fabricado en China. Griffiths enfatizó la importancia de alcanzar una solución favorable, ya que el impacto económico de estos aranceles podría ascender a «cientos de millones de euros» este año. «Hay una voluntad de encontrar una solución», afirmó el CEO, mostrando optimismo ante las negociaciones.
La imposición de aranceles a los vehículos eléctricos importados desde China afecta directamente la rentabilidad de SEAT. Griffiths explicó que la rentabilidad por vehículo se situó en el 4,4%, por debajo del objetivo estratégico de la empresa del 5%. Asumir pérdidas debido a los aranceles no es una opción viable para la empresa.
Estrategia de expansión en Estados Unidos: Manteniendo el rumbo a pesar de la incertidumbre
Ante la escalada arancelaria por parte de Estados Unidos, Griffiths reafirmó que los planes de CUPRA para ingresar al mercado estadounidense a finales de esta década siguen adelante. A pesar de la incertidumbre generada por las políticas comerciales proteccionistas, la empresa mantiene su compromiso de expandirse a nuevos mercados y ofrecer sus productos a un público global.
Planes de inversión tan importantes y a tan largo plazo no pueden depender de estos cambios», declaró Griffiths, subrayando la importancia de la flexibilidad y la adaptabilidad en un entorno empresarial volátil. La clave del éxito, según el CEO, radica en «dar una respuesta a lo que piden los clientes». Los planes actuales contemplan el lanzamiento de al menos dos vehículos en el mercado estadounidense, uno eléctrico y otro de combustión.
México como plataforma de producción: Una opción estratégica para el mercado americano
Ante la pregunta sobre la posible construcción de una planta de producción en Norteamérica, Griffiths señaló que México es una opción atractiva debido a su proximidad con Estados Unidos y la ausencia de aranceles con Europa. México se presenta como una plataforma estratégica para la producción de vehículos destinados al mercado americano, permitiendo a SEAT y CUPRA evitar los aranceles impuestos a las importaciones desde otros países.
La decisión final sobre la ubicación de la planta de producción dependerá de diversos factores, como los costes laborales, la infraestructura disponible y los incentivos gubernamentales. No obstante, México se posiciona como una opción muy competitiva para SEAT y CUPRA en su estrategia de expansión en el mercado norteamericano.
El impacto a largo plazo del proteccionismo en la innovación y la competitividad
Más allá de los efectos inmediatos en la rentabilidad y la expansión geográfica, el proteccionismo y los aranceles pueden tener consecuencias negativas a largo plazo para la industria automotriz. Al limitar la competencia y encarecer los productos importados, estas medidas pueden frenar la innovación, reducir la eficiencia y perjudicar a los consumidores.
En un mercado globalizado, la competencia es un motor fundamental para el desarrollo de nuevas tecnologías y la mejora de la calidad de los productos. El proteccionismo, al aislar a las empresas de la competencia internacional, puede reducir su incentivo para innovar y adaptarse a las demandas cambiantes del mercado. Esto, a su vez, puede perjudicar la competitividad de la industria automotriz a largo plazo.
La necesidad de un enfoque equilibrado: Promoviendo el libre comercio y la protección del empleo
El debate sobre el proteccionismo y el libre comercio es complejo y multifacético. Si bien es importante proteger el empleo y la industria nacional, también es fundamental promover la competencia y el acceso a productos y tecnologías de vanguardia. Encontrar un enfoque equilibrado que permita proteger los intereses de las empresas y los trabajadores, al tiempo que se fomenta la innovación y el crecimiento económico, es un desafío clave para los gobiernos y las organizaciones internacionales.
En el caso de la industria automotriz, es crucial que los gobiernos promuevan políticas que faciliten la transición hacia la movilidad sostenible, sin recurrir a medidas proteccionistas que puedan frenar la adopción del vehículo eléctrico y perjudicar la competitividad del sector. Es necesario fomentar la colaboración entre empresas, gobiernos e instituciones académicas para desarrollar nuevas tecnologías, mejorar la infraestructura de carga y concienciar a los consumidores sobre los beneficios de la movilidad eléctrica.