La firma de Múnich nos continúa desgranando el que será su futuro BMW M3 eléctrico con este tercer episodio de una docuserie que lleva el nombre de BMW M Electrified. Al igual que en las dos entregas anteriores, la compañía alemana da pequeñas pinceladas de este emocionante criatura que aún se encuentra en fase de desarrollo, que nacerá sobre la sofisticada plataforma Neue Klasse, y que se va a comercializar acompañado por futuros BMW M3 con mecánicas de combustión. Que no se pongan nerviosos los ‘petrolhead’.
En este tercer episodio de BMW M Electrified, el director ejecutivo de BMW M, Franciscus van Meel, no se muerde la lengua al decir que la actual ‘mula’ de pruebas del BMW M3 eléctrico en realidad ha nacido sobre la base de un BMW M2 experimental que ya se pudo ver antaño en sus fases de verificación y que escondía una mecánica capaz de rondar los 1.000 CV de potencia. Van Meel asegura que aquella criatura era realmente divertida de conducir en línea recta, pero que no transmitía la capacidad de control que todo vehículo concebido por esta división merece y está obligada a ofrecer a su conductor. De ahí que se pusieran manos a la obra para trasladar toda esa tecnología a una nueva ‘mula’ con mucho de BMW i4.
El futuro BMW M3 no solo será 100% eléctrico. Puedes respirar tranquilo
Al igual que hemos visto en otras publicaciones de la firma de Múnich, en esta tercera entrega de BMW M Electrified se puede ver a este sensacional prototipo rodar por pistas heladas donde los ingenieros de la compañía alemana están limando las pequeñas asperezas en su comportamiento dinámico. Sin embargo, ahora se han animado a dar un paso más allá y avanzar las notas sonoras que tendrá la mecánica eléctrica del futuro BMW M3. Porque hay un momento en el que el piloto pisa el acelerador y se emite una banda sonora muy diferente a lo que hemos conocido en otras criaturas de su especie hasta el momento.
A velocidad constante, suena prácticamente como un motor de combustión interna convencional, pero a medida que el conductor pisa el acelerador, ese sonido se vuelve mucho más fuerte y comienza a emitir una melodía muy particular, pero muy complicada de describir. Básicamente porque es algo así como una mezcla entre motor de combustión, motor eléctrico y jet a reacción. Una particular ‘mezcolanza’ que como todo en la vida tendrá sus defensores, pero también sus detractores.