El proceso de crear un nuevo modelo suele llevar varios años, como ya hemos podido constatar en más de una ocasión. De ahí que no resulte extraño encontrarnos con mulas de pruebas casi a la vez que se presenta una renovación, o pocas semanas después. En esta ocasión el protagonista es el Mercedes Clase V, el lujoso monovolumen de la marca de la estrella, así como su versión eléctrica, el EQV. Su gama se completa con una variante camper, el Marco Polo, y con otra más enfocada a un uso profesional, el Vito.
El Clase V/EQV recibió una actualización a principios de este mismo año, con leves cambios estéticos y una ligera reorganización de la gama. Es decir, que en esencia sigue siendo el mismo vehículo lanzado en 2014 y que también recibió algunos cambios en 2019. Actualmente, el Clase V está disponible con tres versiones diésel, de entre 163 y 239 CV, y como novedad respecto a la gama de 2019, uno de gasolina, el V 300 de 231 CV que, además, está asociado a la hibridación ligera y porta la etiqueta Eco.
La siguiente generación, sin embargo, tendrá muy poco que ver con la actual. Esta imágenes suponen el primer avistamiento de un modelo que aún tardará en llegar al mercado, pues no sucederá como pronto hasta finales de 2025.
La próxima Clase V podría ser sólo eléctrica… y no llamarse EQV
Lo seguro es que habrá grandes cambios, pues cabe la posibilidad de que el nuevo Clase V abandone los motores de combustión y apueste todo a la propulsión eléctrica. Al menos ese es uno de los detalles que se pueden extraer de la unidad de pruebas, que claramente toma la carrocería del actual Clase V Compacto (mide 4,90 metros de longitud) y porta las pegatinas de vehículo eléctrico. Como curiosidad, el actual EQV no está disponible con esta configuración, sino con las versiones Larga (5,14 metros) y Extralarga (5,37 metros).
La plataforma será la nueva plataforma VAN.EA EV diseñada para vehículos comerciales ligeros. La plataforma VAN.EA presenta un diseño de tres módulos que permite adaptarla fácilmente a varios tamaños de vehículos, y para la próxima Clase V se esperan propulsores de uno y dos motores.
La otra parte a tener en cuenta es que Mercedes va a abandonar las denominaciones EQ seguidas por la letra correspondiente a la familia (EQA, EQS, EQV…), tal y como ya ha hecho con el Clase G eléctrico, cuya denominación es ‘G 580 con tecnología EQ. Queremos pensar que para próximos lanzamientos le darán una vuelta a este peculiar nombre.
Sea como fuere, se seguirán ofreciendo al menos dos longitudes de carrocería y un interior con hasta ocho plazas con múltiples posibilidades. Respecto a la posibilidad de seguir contando con motores de combustión, es una posibilidad que no debe descartarse y que dependerá de cómo evolucione el mercado eléctrico. Desde luego, si los responsables de la marca de la estrella deciden renunciar a ellos, deberán equipar el Clase V con un paquete de baterías que le permita una gran autonomía, algo que el actual EQV no ofrece.
