A comienzos de los años ‘30 en Alemania surge un proyecto para fabricar un automóvil que fuese accesible para el gran público. Cuando Adolf Hitler se alzó con el poder en 1933, promocionó un concurso a empresarios para la concesión del llamado ‘coche del pueblo’ o Volkswagen en alemán.
Nada menos que Ferdinand Porsche fue el encargado de llevar a cabo dicho proyecto cuyo objetivo era el de desarrollar un vehículo sencillo y barato. Un vehículo capaz de motorizar a un país entero. Un año más tarde y bajo absoluto secreto, Ferdinand construye el primer prototipo que fue bautizado irónicamente por el New York Times como ‘Beetle’ o escarabajo. Y todo debido a su particular diseño exterior.
33. Volkswagen Karmann Ghia
En el Salón de París de 1953 se presenta un prototipo diseñado por Luigi Segre para el carrocero italiano Ghia. Atraído por su diseño, los altos ejecutivos de Volkswagen decidieron desarrollar un vehículo de ‘imagen’ para sus clientes más pudientes durante la postguerra.
Pusieron entonces sus ojos en esta criatura, adentrándose así en el segmento de los vehículos deportivos. Llegaron a un acuerdo con Ghia y este vehículo se convirtió en una realidad en el año 1955.
Los chicos de Volkswagen contrataron al carrocero alemán Karmann para que se encargarse de la producción de este vehículo, mientras que Ghia se encargaba del diseño. Lo particular de este vehículo es que nacía sobre la base de un Volkswagen Sedán, que aportaba fiabilidad, economía y un sencillo mantenimiento.
La carrocería del Volkswagen Karmann Ghia se fabricaba a mano y eso se acababa reflejando en el precio del vehículo. A pesar de todo este deportivo, que fue comercializado con carrocería coupé de cuatro plazas, así como con carrocería descapotable y dos asientos (este apareció en agosto de 1957), fue todo un éxito. Hasta el punto de que al cesar su producción en 1974, se habían ensamblado 445.000 unidades. Y a ellas había que sumar las 41.600 que salieron de una planta en Brasil.
Más de 10.000 unidades se vendieron en su primer año de vida, cuando salían de forma exclusiva de la planta de Karmann en Osnabrück, Alemania.
