La pegatina de la ITV en tu vehículo puede dar una falsa sensación de seguridad. A pesar de exhibirla, si no has renovado la Inspección Técnica de Vehículos dentro de los plazos correspondientes, te arriesgas a una multa de 200 euros. Aunque la pegatina indique una vigencia, esta no sustituye el registro oficial de la inspección. Las autoridades verifican el cumplimiento a través de la matrícula y el sistema digital, no por la simple presencia del adhesivo en el parabrisas.
Muchos conductores creen erróneamente que el hecho de portar la pegatina válida en el coche es suficiente para evitar sanciones. Sin embargo, la Dirección General de Tráfico y las autoridades competentes cuentan con bases de datos centralizadas que registran las fechas exactas de cada inspección. Incluso si el adhesivo muestra una fecha válida, si el registro oficial indica que la ITV ha caducado, podrías enfrentarte a la multa.
Esta confusión se agrava cuando los conductores heredan vehículos usados o alquilan coches, ya que a menudo no comprueban el estado del registro oficial en detalle.
3Qué hacer para evitar sorpresas
Para no enfrentarte a una multa inesperada, es recomendable llevar un control riguroso de las fechas de la ITV. Actualmente, muchas aplicaciones móviles y servicios online ofrecen recordatorios para que los conductores no pasen por alto este trámite obligatorio. Además, consultar el estado del vehículo a través de la DGT puede ahorrar problemas futuros.
También es importante conocer las normativas específicas en cada comunidad autónoma, ya que algunas regiones tienen controles más estrictos sobre este tema.