Un nuevo S en la gama de Audi. La marca alemana pone la guinda a la familia del Q2 con su versión más deportiva, el SQ2. Un modelo que hemos podido ir viendo a lo largo de su evolución, pues ya desde el año 2016, cuando conseguimos las primeras fotos espía del nuevo modelo, comprobamos la intención de la firma de los aros por poner en el mercado un crossover GTI de altas prestaciones.
Y no hay duda de que estamos ante un modelo de altas prestaciones. Porque el nuevo SQ2 tiene su auténtica estrella bajo el capó, donde muestra un motor 2.0 TFSI con 300 caballos de potencia y un par máximo de 400 Nm que permanece constante entre 2.000 y 5.200 revoluciones. Y estira el motor hasta las 6.500 vueltas. Con esas cartas de presentación, está claro que el carácter que muestra todo S de Audi no le va faltar. Sus prestaciones están al nivel que se puede esperar: aceleración de 0 a 100 km/h en 4,8 segundos y una velocida máxima de 250 km/h.
Ese motor ha sido especialmente retocado para un modelo de estas características. Así los árboles de levas de admisión y escape son ajustables para optimizar el llenado y el intercambio de gases. En el lado del escape, el sistema Audi valvelift system (AVS) ajusta la alzada de las válvulas en dos etapas, en función de la demanda. Esto reduce las pérdidas en la cámara de combustión, y asegura un flujo de gases de escape óptimo hacia el turbocompresor, particularmente en rango de bajas revoluciones. Se traduce en una respuesta más rápida y un aumento adicional del par motor.
Y además de prestaciones, características que buscan la máxima eficiencia, como las dos válvulas rotativas de accionamiento eléctrico que regulan el flujo del refrigerante o el colector de escape integrado en la culata, que ayuda al motor a alcanzar rápidamente su temperatura óptima de funcionamiento. La transmisión que ofrece es un cambio S tronic de siete velocidades y doble embrague; dispone de Audi Drive Select que cuenta con un modo «efficiency» en el ue el embrague desacopla la transmisión del motor, permitiendo que se desplace en modo de marcha por inercia. Con el sistema start-stop activo, el propulsor se desconecta desde una velocidad de 7 km/h. Y si hablamos de características dinámicas, cuenta con tracción quattro de serie.
Con suspensión deportiva de serie
Además, cuenta con una suspensión deportiva que busca el máximo dinamismo. Esta configuración de la suspensión rebaja la altura de la carrocería 20 milímetros respecto a la altura normla. Y además, cuenta con una dirección progresiva de serie con un tarado específico para que la fuerza necesaria para mover el volante cambie a medida que se giran las ruedas. Cuanto mayor es el ángulo de la dirección, más directa es la relación, lo que mejora la agilidad al maniobrar, tanto en tráfico urbano como en curvas cerradas.
El diseño también recibe dosis de deportividad tanto en el exterior como en el interior. La vista externa ya muestra un aspecto inconfundible con el frontal que destaca por las ocho barras verticales dobles que dividen la gran parrilla Singleframe octogonal. Y ese aspecto se acentua con faros LED de serie y las luces traseras LED con intermitentes dinámicos, Y se remata con las taloneras en la zona inferior de las puertas; las carcasas de los retrovisores en aluminio brillantem el spoiler en el techo o el difusor trasero con cuatro salidas de escape.
Estrena Audi Virtual Cockpit
Y en el interior, hay cambios en el cuadro de instrumentos, en el que el Audi Virtual Cockpit reemplaza al cuadro de relojes tradicional con el que cuentan los Audi Q2. Este dispositivo cuenta con una pantalla de 12,3 pulgadas configurable que tiene tres modos diferentes de visualización, incluyendo una pantalla que coloca el tacómetro centrado en posición destacada. La información más importante también puede proyectarse en una pantalla con el head-up display que se ofrece en opción.
Y el diseño tiene un marcado aire deportivo tanto por estilo como por materiales. La tapicería, techo, pilares y asientos están revestidos en color negro. Y por todo el interior aparecen inserciones en aluminio cepillado. O elementos como los pedales o reposapiés en acero inoxidable. Los asientos combinan, de serie, piel y tejido con costuras de contraste en rojo y gris y logotipos S en relieve.
El último aspecto a destacar es la avalancha de sistemas de asistencia al conductor en el que el Audi pre sense front es equipamiento de serie. Cuenta con un radar que detecta situaciones peligrosas al cruzar peatones y otros vehículos por delante. El sistema avisa al conductor con señales visuales y acústicas, e inicia una maniobra de frenado de emergencia si fuera necesario. Y también ofrece en este apartado elementos como el control de crucero adaptativo con función stop&go y el asistente a la conducción en atascos traffic jam assist, el Audi active lane assist queayuda al conductor a permanecer en el carril.