Son cientos las razones que se me ocurren para tener un sensacional Mazda MX-5, un coche ilustre que al menos una vez en la vida deberías de conducir. Y da igual la generación que sea, porque cualquiera de ellas tiene su propio encanto. Sin embargo, este inmaculado Miata que ahora mismo tienes delante de tus ojos ‘solo’ tiene 38 razones para desear llevártelo a casa. Pero se trata de 38 razones que marcan la diferencia con todos los de su época.
Esas 38 razones mejor las conviertes en millas, porque este sensacional Mazda MX-5 de primera generación, la conocida como NA, que salió de fábrica allá por el año 1990 tan sólo ha recorrido el equivalente a unos 61 kilómetros en toda su vida. Algo digno de alabanza para un vehículo con 34 años de historia a sus espaldas y que muy probablemente sea suficiente para considerarse el Miata con menos kilómetros en su haber a día de hoy en todo el mundo.
Este Mazda MX-5 tiene 34 años y solo 61 kilómetros
Semejante detalle se ha convertido en el detonante primordial para que alguien pagara una escalofriante cifra para poder llevárselo a casa. Tan alta como que supera el precio del MX-5 más caro que se pueden comprar en Estados Unidos a día de hoy. Y es que por medio de la página de subastas Bring A Trailer, se han desembolsado nada menos que 40.500 dólares (37.815 euros) por este Mazda MX-5 en color Classic Red.
Esa cuantía le vale para convertirse también en el Miata más caro subastado por medio de dicha plataforma, superando al anterior en su puesto por 5.500 dólares (5.135 euros). Pero también es cierto que esa cifra supera por mucho los 28.985 dólares (27.060 euros) que cuesta al otro lado del océano la versión de acceso a un Mazda MX-5 a estrenar, que no es otro que un Sport con el motor 2.0 Skyactiv-G y cambio manual. Pero es que también supera el precio del MX-5 más caro que se vende en Estados Unidos, un extraordinario RF Club, que cuesta 40.210 dólares (37.540 euros).
Sólo ha tenido un propietario y nunca ha pisado la carretera
El afortunado y nuevo propietario de este inmaculado Mazda MX-5 va a recibir una auténtica joya que ha permanecido al cuidado de su único propietario desde el primer día. Tanto mimo ha recibido que ha sido conservado en perfectas condiciones para que incluso sus bajos y su motor reluzcan como el color rojo de su carrocería o el de su Hard Top. El interior también se encuentra en un inmejorable estado, sin grietas en el salpicadero, marcas en sus asientos… Hasta el volante y el pomo del cambio se encuentran como cuando salieron del concesionario en el año 1990.
Ahora bien, es probable que su nuevo dueño quiera perpetuar la historia de este Mazda MX-5, de forma que muy probablemente tampoco lo use para salir a dar un paseo ni poner en apuros a su sencillo 1.6 atmosférico, un bloque capaz de ofrecer 116 CV de potencia y 135 Nm de par motor, cifras más que suficientes para ofrecer una gran diversión a la hora de conducir este legendario roadster de propulsión posterior.