Adquirir un coche puede ser un proceso lleno de dudas y expectativas. Los compradores deben considerar múltiples factores: el uso del coche, el tamaño adecuado, los kilómetros a recorrer mensualmente, y si será para uso familiar o profesional.
En este proceso, se enfrentan a barreras como la escasez de oferta, el tiempo limitado y, por supuesto, las restricciones presupuestarias. En este contexto, la opción de importar un coche surge como una solución interesante para muchos, pero no exenta de desafíos.
Desde Importrust, una plataforma de importación de vehículos recién llegada a España, se destacan cuatro razones clave para considerar la importación de un automóvil en lugar de comprarlo en el mercado nacional. Estas razones son particularmente atractivas para quienes buscan ahorrar y obtener el vehículo de sus sueños.
1La situación económica del mercado
Primero, el incremento de los precios nacionales debido al alza de los costes es un factor significativo. La alta inflación y el aumento de los costes de las materias primas y componentes tecnológicos han elevado los precios de los vehículos en España.
En contraste, la importación permite ahorrar hasta un 30% para compradores particulares y hasta un 40% para profesionales. Carlos Ron, country manager de Importrust en España, explica que esta diferencia de precio se debe a varios factores, incluyendo la carga fiscal, los costes de producción y los márgenes de beneficio practicados por las concesionarias nacionales. En países de fabricación y exportación, la variedad de modelos disponibles también es mayor, lo que permite a los compradores elegir entre más opciones y ahorrar significativamente.
