El verano es sinónimo de aventura, de dejar atrás la rutina y lanzarse a descubrir lugares que, hasta ahora, solo existían en nuestros sueños. Es la época del año en la que el sol parece alargar las horas, invitándonos a explorar más allá de lo habitual. En este contexto, los road trips emergen como la opción perfecta para los espíritus inquietos que desean libertad total en sus viajes. Porque cuando se trata de recorrer kilómetros, el destino se convierte en solo una parte de la aventura; el trayecto, y cómo lo experimentamos, es lo que realmente cuenta.
Viajar en coche no solo nos permite mantener el control sobre nuestro itinerario, sino que también nos regala una conexión más íntima con el paisaje. Podemos detenernos a contemplar una vista espectacular, tomar un desvío inesperado hacia un pequeño pueblo o simplemente dejarnos llevar por el placer de conducir sin prisas. Con la flexibilidad que ofrecen los servicios de suscripción de coches, como el que propone Bipi, ahora es posible elegir el vehículo perfecto para cada tipo de viaje. A continuación, te presentamos cuatro rutas icónicas que puedes disfrutar este verano, acompañadas del coche ideal para cada una.
2Road Trip de montaña por Asturias: La versatilidad de un C-SUV
Si lo tuyo son las montañas y los paisajes verdes, Asturias te espera con los brazos abiertos. Este rincón del norte de España es un auténtico edén para los aficionados al senderismo, la escalada y la naturaleza en estado puro. Las montañas escarpadas de los Picos de Europa, los frondosos valles y los pintorescos pueblos rurales conforman un escenario de cuento de hadas que pide ser explorado con tiempo y calma.
Para este viaje, un C-SUV es la elección perfecta. Estos vehículos combinan la robustez necesaria para enfrentarse a las sinuosas carreteras de montaña con la comodidad de un coche de ciudad. Además, su espacio interior te permitirá llevar todo el equipo que necesites para tus aventuras al aire libre, desde botas de montaña hasta tablas de surf.
Durante tu ruta, asegúrate de detenerte en Cangas de Onís para ver su famoso puente romano, y sigue hasta los Lagos de Covadonga, un paraje natural que te dejará sin aliento. No te olvides de probar la sidra asturiana en alguna sidrería tradicional y disfrutar de los paisajes espectaculares que se despliegan en cada curva del camino.