El verano es una temporada esperada por muchos, donde los días largos y soleados invitan a escaparse y disfrutar de unas merecidas vacaciones. Sin embargo, junto con las alegrías del verano, viene un desafío importante: el calor extremo. Con los termómetros superando los 40 grados en muchas partes del país, los viajes por carretera pueden convertirse en una experiencia sofocante si no se toman las precauciones necesarias.
Ya sea que estés volviendo a casa después de unas vacaciones o que seas un profesional que depende de su vehículo para trabajar, el calor puede ser un enemigo silencioso. A continuación, te ofrecemos cinco consejos imprescindibles para asegurarte de que el calor extremo no arruine tu viaje de regreso.
2Asegúrate de que el sistema de climatización funcione correctamente
Viajar en un coche que se siente como un horno no solo es incómodo, sino que también es peligroso. La temperatura ideal dentro del vehículo debería mantenerse entre los 22 y 24 grados, lo cual es crucial para evitar la fatiga y la somnolencia del conductor. Antes de salir a la carretera, revisa el sistema de climatización de tu coche. Asegúrate de que el aire acondicionado esté funcionando de manera eficiente, y no lo configures por debajo de los 20 grados, ya que esto puede aumentar el consumo de combustible considerablemente.
Si el sistema de climatización de tu coche no está en buenas condiciones, una opción temporal es conducir con las ventanas abiertas, al menos al principio del viaje, para permitir que el aire circule y refresque el interior. Sin embargo, a altas velocidades, cerrar las ventanas y encender el aire acondicionado es más eficiente tanto en términos de confort como de consumo de combustible.