Quizás no habías caído en esto, pero estando de baja no siempre vas a poder conducir y si lo haces con ciertas enfermedades, te puede caer una multa gorda. La baja laboral la expide un médico y determina que un trabajador tiene un problema de salud concreto que le impide trabajar durante un periodo de tiempo determinado, ya sea un problema físico o mental.
Ciertas lesiones muy habituales, como la ansiedad o la lumbalgia, son incompatibles con la conducción, por lo que tienes que tener mucho cuidado a la hora de ponerte al volante estando de baja. Si la enfermedad por la que coges la baja está legalmente reñida con la conducción puedes tener problemas. Por ello es mejor tener claro con que enfermedades no se puede conducir.