La Inspección Técnica de Vehículos (ITV) es un procedimiento obligatorio en muchos países, diseñado para garantizar que los vehículos que circulan por las vías públicas cumplan con los estándares mínimos de seguridad y emisiones. Aunque comúnmente se presta atención a aspectos como frenos, luces o emisiones contaminantes, las matrículas también juegan un papel crucial en esta inspección.
Un estado inadecuado de las placas puede ser motivo suficiente para que un vehículo no apruebe la ITV. A continuación, se detallan seis razones por las cuales la matrícula de tu coche podría impedir que superes esta inspección.
3Fijación inadecuada o placa suelta

La correcta sujeción de la matrícula es vital para garantizar su legibilidad y permanencia en el vehículo. Durante la ITV, se inspecciona que las placas estén firmemente adheridas y no presenten riesgo de desprenderse. Una matrícula mal sujeta o que muestra signos de estar a punto de caerse se considera un defecto grave.
Este problema puede surgir por el desgaste de los materiales de fijación, impactos o reparaciones inadecuadas. Antes de acudir a la inspección, es recomendable verificar que las matrículas estén bien sujetas y, de ser necesario, reforzar su fijación para evitar inconvenientes.