Nuestras costumbres al volante influyen directamente en la vida útil de muchos componentes, como el embrague. Este elemento es clave para que podamos cambiar de marcha sin problema. Sin embargo, con el tiempo es inevitable su desgaste, resultando en costosas reparaciones. Aprender a cuidarlo correctamente puede ahorrarte mucho dinero a largo plazo. Por ello, en este artículo, te damos seis sencillos trucos que puedes aplicar a tu rutina de conducción para que tu embrague dure más tiempo.
4No apoyes el pie en el pedal mientras conduces
Otra ‘manía’ al volante que tienen muchos conductores es apoyar el pie izquierdo en el pedal del embrague mientras conducen, incluso cuando no están cambiando de marcha. ¡Gran error! Porque aunque parezca que no estás ejerciendo presión, lo cierto es que esta ligera fuerza constante puede acelerar su desgaste.
Para cuidar la salud de tu coche, lo más recomendable es utilizar el reposapiés que viene de serie en la mayoría de vehículos. Descansa allí el pie cuando no lo necesites y reserva el pedal del embrague solo para los momentos en que tengas que cambiar de marcha. Con este simple gesto, reducirás significativamente el desgaste a largo plazo.