El verano es una época de desplazamientos y aventuras en carretera. Millones de españoles aprovechan el buen tiempo para viajar, muchos de ellos en moto, disfrutando de la libertad que ofrece este medio de transporte. Sin embargo, con el aumento del tráfico, también se incrementan los riesgos de accidentes. De acuerdo con datos de AMV, una de las empresas líderes en seguros de moto, uno de cada cuatro accidentes de tráfico está relacionado directamente con el sueño y la fatiga. Estos problemas, aunque a menudo subestimados, tienen un impacto significativo en la seguridad vial.
3Efectos sobre el comportamiento del conductor
Conducir en estado de somnolencia o fatiga puede alterar nuestro comportamiento de manera significativa. Los conductores cansados tienden a volverse más nerviosos y agresivos, lo que puede llevar a decisiones arriesgadas y comportamientos peligrosos en la carretera. Este estado de ánimo incrementa el riesgo de accidentes, ya que los conductores pueden no evaluar adecuadamente las situaciones y tomar decisiones impulsivas.
Además, la fatiga y la somnolencia pueden provocar cambios de postura inapropiados al conducir una moto, lo que puede afectar la estabilidad y el control del vehículo. Esto, combinado con una capacidad de reacción reducida y una percepción alterada, crea un entorno extremadamente peligroso para el conductor y otros usuarios de la vía.