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¿Acelerar o frenar? La decisión que debes tomar ante un semáforo en ámbar

Cualquier conductor, ya sea novato o experimentado, ha enfrentado la disyuntiva de detenerse o pasar ante un semáforo que acaba de cambiar de verde a ámbar. Esta situación genera dudas y confusión, a pesar de que las normas de tráfico deberían ser claras desde el momento en que se obtiene el permiso de conducir. ¿Qué es lo correcto? ¿Es legal acelerar para superar un semáforo en ámbar? ¿Puede esto resultar en una multa?

La Dirección General de Tráfico (DGT), consciente del desconcierto generalizado, aclara regularmente la normativa respecto a este escenario a través de sus canales oficiales. A continuación, exploraremos las implicaciones legales y de seguridad relacionadas con la decisión de acelerar o frenar ante un semáforo en ámbar.

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La importancia de la seguridad vial

Más allá de las implicaciones legales, la seguridad vial es una prioridad. La fase ámbar de los semáforos, aunque breve, puede causar confusión y comportamientos impredecibles entre los conductores. Las estadísticas muestran que las decisiones tomadas durante esta fase pueden tener consecuencias fatales.

La DGT trabaja continuamente en campañas de concienciación y educación para mejorar el comportamiento de los conductores. La comprensión y el respeto de las señales de tráfico son fundamentales para reducir los accidentes y salvar vidas. La decisión de frenar o acelerar debe ser siempre informada y consciente de las posibles consecuencias.