Aunque en su momento los pudimos adelantar, se hicieron de rogar, pero desde el 21 de marzo han entrado numerosos cambios que han modificado la vida de los conductores. Son nuevas normas de circulación que hay que aprenderse y que afectan a distintos ámbitos. Aumentan los puntos que pierdes por usar el móvil mientras conduces, por no utilizar de forma adecuada el cinturón de seguridad, sistemas de retención infantil, casco y otros elementos de protección.
Pero hay un tema que siempre ha generado debate… el de los adelantamientos. Más concretamente si hablamos de carreteras convencionales. Ante esto, hay un nuevo dictamen para obrar que nos puede gustar más o menos, pero que tendremos que aplicar al dedillo si queremos librarnos de una dura multa por parte de la DGT.
3Más control a la hora de adelantar
Una de las críticas recurrentes que se ha hecho a esta medida es que su aplicación facilitará la instalación de radares de tramo. No lo dicen sus detractores, lo dijo el propio Pere Navarro, director de la DGT, asegurando que eliminar el margen «puede favorecer en el futuro la instalación de más radares de tramo, más justos que los que están en un solo punto».
No olvidemos que, hasta ahora, si un radar de tramo situado en una vía secundaria multaba a un conductor por circular entre 90 y 110 km/h, este podía alegar que había realizado uno o más adelantamientos, lo que facilitaría seguir adelante con el recurso de la multa. Ahora, esa posibilidad se pierde absolutamente. Ya no hay «ni trampa ni cartón».