El alcohol y las drogas siguen siendo una combinación explosiva al volante, pero ¿qué pasa cuando no hay volante? El conductor de un patinete eléctrico en Orpesa ha demostrado que el riesgo no se limita a los coches: quintuplicó la tasa de alcohol permitida y dio positivo en cocaína tras un accidente. Lo más increíble de esta historia es que, a pesar de su temeridad, el conductor no sufrió lesiones graves ni puso en peligro a terceros de forma directa. Sin embargo, las consecuencias legales y el susto deben servir como un recordatorio para todos.
2Los patinetes, ¿un juguete o un vehículo?
Desde su llegada a las calles, los patinetes eléctricos han transformado la movilidad urbana. Pero este caso deja claro que no son simples juguetes. Al igual que cualquier otro vehículo, están sujetos a normativas específicas que buscan garantizar la seguridad de todos los usuarios de la vía.
Conducir bajo los efectos del alcohol y las drogas es igual de peligroso en un patinete que en un coche o una motocicleta. Aunque la velocidad de un patinete pueda ser inferior, el riesgo de provocar o sufrir un accidente es muy real. Según la Dirección General de Tráfico (DGT), en 2022 se registraron más de 500 accidentes graves relacionados con VMP, muchos de ellos vinculados al consumo de sustancias.