Antonio Resines es, sin duda, uno de los rostros más icónicos del cine y la televisión en España. A lo largo de su carrera, ha participado en innumerables producciones, desde comedias como la popular serie Los Serrano hasta películas emblemáticas como El Día de la Bestia o La buena estrella. A pesar de su carrera exitosa y su presencia habitual en programas televisivos como El Hormiguero o La Resistencia, hay un detalle menos conocido de su carrera: su papel como la imagen de un coche que casi ha desaparecido por completo de las carreteras.
Corría el año 1999 cuando el presentador español protagonizó un anuncio de Kia, una marca surcoreana que en ese momento apenas comenzaba a hacerse un hueco en el mercado español. En concreto, Resines fue el rostro del Kia Sephia, una berlina de corte conservador que prometía un rendimiento notable para la época. Sin embargo, a pesar del carisma del actor y el atractivo del precio del coche, dicho modelo no dejó una huella duradera en la industria automovilística ni en el imaginario colectivo de los conductores españoles.
Así era el coche que quiso vender Antonio Resines hace tres décadas
El Kia Sephia fue uno de los primeros intentos de Kia por competir en el segmento de las berlinas compactas. Equipado con un motor de gasolina de 117 caballos de potencia, ofrecía un rendimiento aceptable para los estándares de finales de los noventa. Sin embargo, su estética era uno de sus puntos más controvertidos. Aunque la berlina tenía una línea sobria y funcional, muchos consideraban su diseño como “peculiar” y poco atractivo en comparación con otros modelos más estilizados de la época. Competir contra gigantes del mercado europeo como el Ford Escort o el Opel Astra no fue tarea fácil para el Sephia.
El anuncio de Kia con Antonio Resines presentaba al coche como una alternativa confiable y asequible, con la simpatía del actor ayudando a humanizar una marca que, en ese momento, aún era relativamente desconocida en España. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos publicitarios, el Sephia no logró calar entre los conductores como se esperaba. Si bien algunos conductores lo adquirieron por su precio competitivo, el coche comenzó a mostrar problemas de fiabilidad a largo plazo, lo que afectó gravemente su popularidad.
La desaparición del Kia Sephia que promocionó Antonio Resines en los ’90
Los años han pasado, y aunque Kia ha evolucionado y se ha consolidado como una marca respetada en Europa gracias a modelos como el Sportage y el Sorento, el Sephia es una de esas reliquias automovilísticas que parecen haber sido olvidadas. Hoy en día, es extremadamente raro ver un Sephia en funcionamiento. La mayoría de estos coches han desaparecido debido a su limitada durabilidad y a la falta de repuestos, lo que ha convertido al Sephia en un modelo casi extinto en las carreteras.
Este hecho, sumado a la transformación de Kia en una marca más innovadora y de mayor calidad, ha hecho que el Sephia quede como un simple recuerdo de los inicios difíciles de la compañía en España. Quizás Antonio Resines logre seguir siendo un icono de la cultura popular, pero el coche que intentó vender hace más de dos décadas ha quedado relegado al olvido.
