Hace poco más de tres años que la firma bávara puso a la venta su eficiente BMW i3, un vehículo de cuatro metros y completamente eléctrico (si no contamos a la versión REX) que apuesta por lo último en tecnología a todos los niveles. Pues bien, ahora este urbanita se actualiza por completo, aunque a nivel de diseño han sido bastante recatados, pues hay que mirarlo un par de veces con detenimiento para percatarnos de cual generación es.
Discretos cambios estéticos
Este nuevo BMW i3 estrena unos paragolpes rediseñados, además de que varía el diseño del piloto que va en el paragolpes frontal y los proyectores delanteros ahora tienen tecnología Full LED para todas sus funciones. Por último, se han pintado de color negro los pilares delanteros y su prolongación por el techo, de igual forma que estrena dos nuevos tonos para la carrocería.
Dentro los cambios si que son inapreciables y se limitan a nuevas molduras (ponemos que fabricadas con elementos reciclados como sucede ahora), nuevos tapizados… Pero BMW no ha variado la posición del cinturón de seguridad de las plazas delanteras, por lo que para dejar salir a los ocupantes traseros hay que desengancharlo y abrir la puerta delantera, pues sino, no se abren las posteriores (lo podían haber solucionado montando el cinturón en el asiento, como hacen en sus descapotables).
Ahora con 170 y 184 CV
Mecánicamente tampoco se han quebrado la cabeza, porque este revitalizado BMW i3 mantiene su motor eléctrico capaz de erogar 170 CV de potencia y 250 Nm de par motor. Gracias a ello necesita 7,3 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h (8,1 las versiones REX) y puede alcanzar los 150 km/h de velocidad punta. Sigue estando combinado con una batería de ión litio con 33 kWh de capacidad (la usada actualmente), que le procura una autonomía entre 290 y 300 kilómetros según ciclo NEDC. Si queremos incrementar esta autonomía en unos 150 kilómetros, BMW nos ofrece la versión «range extender» que suma un motor térmico de dos cilindros y con 38 CV que funciona como un generador, pero que no impulsa al vehículo.
Lo más llamativo es la llegada de una versión de altas prestaciones y un enfoque más dinámico, porque aparece este nuevo BMW i3s. Estéticamente suma paragolpes con detalles en color negro brillante, molduras decorativas en azul o plata, llantas específicas de 20 pulgadas con gomas 175/55 delante y 195/50 detrás… Y para mejorar su comportamiento dinámico se ensanchan sus vías en 40 milímetros, se rebaja la suspensión 10 milímetros, que también se endurece, y se han instalado unas barras estabilizadoras diferentes.
Su propulsor eléctrico alcanza los 184 CV y los 270 Nm de par motor, por lo que puede acelerar de 0 a 100 km/h en 6,9 segundos (7,7 los REX) y su velocidad máxima llega a los 160 km/h, también limitada electrónicamente. Eso sí, su gasto es mayor y su autonomía se resiente.
Sus baterías se pueden recargar en un Wallbox a 50 kW en sólo 39 minutos hasta el 80%. Pero en un enchufe doméstico (240 V y 10 A) necesitaremos unas 11 horas para recargar ese 80%.
BMW ofrecerá cuatro niveles de equipamiento: Atelier, Loft, Lodge y Suite. También podrá contar con los últimos sistemas de ayuda a la conducción.