En los últimos años, la DGT (Dirección General de Tráfico) ha puesto en marcha un sistema de control de velocidad conocido como «radares de punto». Estos dispositivos, instalados a lo largo de la red vial española, han causado gran revuelo entre los usuarios de la carretera debido al número cada vez mayor de sanciones impuestas.
Pero ¿cómo es el funcionamiento de estos radares? ¿Cuáles son las principales medidas de seguridad y qué deben hacer los conductores para evitar ser multados? Para responder estas y otras preguntas, vamos a profundizar un poco más en cómo funcionan los radares de punto.
3¿Cómo funcionan los radares de punto?
Los radares de punto funcionan mediante una tecnología avanzada llamada GPS (Global Positioning System). Esta tecnología es capaz de controlar la posición de los vehículos mediante el uso de satélites. Esto permite al sistema tomar la velocidad en un punto y luego seguir la misma trayectoria a lo largo de un tramo, emitir la información y dar la alerta al conductor en caso de superar los límites de velocidad establecidos para ese tramo.
Los radares de punto tienen la capacidad de controlar la velocidad media de un tramo de carretera así como también la velocidad máxima permitida. Estos dispositivos cuentan con un radar de medición de velocidad, que hace uso del GPS para detectar la velocidad del vehículo que pasa cerca. Si se supera el límite, el sistema emite un aviso al conductor para que reduzca la velocidad.