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Así quedó este Lamborghini Urus tras una persecución en la que superó los 200 km/h

Un conductor de un Lamborghini Urus en Canadá ha aprendido de la manera más difícil que, sin importar la velocidad y potencia de su vehículo, evadir a la policía es prácticamente imposible. La audaz persecución que involucró a este lujoso supertodoterreno y las autoridades canadienses culminó en una serie de eventos espectaculares y peligrosos que dejaron al coche en un estado lamentable y a sus ocupantes bajo arresto.

El intento de detención comenzó en una gran autopista del país norteamericano, captada en imágenes de la policía regional de York. Afortunadamente, la carretera estaba relativamente tranquila en ese momento. El modelo italiano, sin embargo, no tardó en meterse en un pequeño callejón sin salida. A pesar de ser bloqueado por un gran vehículo policial Ford Serie F, el conductor logró pasar a toda velocidad y escapar, mostrando su determinación y la potencia de su vehículo.

El Lamborghini Urus fue pisado a fondo

El Lamborghini Urus volvió a aparecer en una autopista, donde alcanzó velocidades superiores a 200 km/h. Las autoridades desplegaron un dispositivo de desinflado de neumáticos, lo que provocó que uno de los neumáticos delanteros explotara. Con un helicóptero policial siguiendo la persecución, las imágenes mostraron cómo la rueda se desprendía del vehículo y rodaba por la carretera.

A pesar de perder el neumático y conducir a aproximadamente 137 km/h, el conductor continuó su huida, generando chispas mientras avanzaba peligrosamente. Tras conducir por diversas zonas durante más de 15 minutos, el SUV italiano se detuvo finalmente en un estacionamiento junto a una pick up plateada. Los ocupantes del vehículo, sin mostrar preocupación aparente, salieron de sus vehículos. Lo que no sabían era que un helicóptero con visión nocturna estaba documentando cada uno de sus movimientos.

Choques con patrullas policiales

Choques con patrullas policiales

Durante la persecución, el conductor del Lamborghini Urus chocó contra varios coches patrulla marcados. Aunque esta parte del vídeo ha sido cortada por las autoridades, estos impactos subrayan la gravedad y peligrosidad de la situación. Los enfrentamientos con las patrullas no solo pusieron en peligro la vida de los oficiales, sino que también añadieron más cargos a los ya serios delitos que enfrentan los involucrados.

Samuel Ugbo-Adeosun, de 21 años, ha sido acusado de operación peligrosa, huida de un agente de paz y no detenerse después de un accidente. Su acompañante, Keenan Adu, de 22 años, enfrenta cargos por agredir a un agente de policía de Canadá con un arma, después de atropellar a un oficial en el pie durante el incidente. Estos cargos reflejan la gravedad de sus acciones y las potenciales consecuencias legales que enfrentarán.