El DB5 'Job 1' no solo representa otro importante éxito de diseño e ingeniería, sino que también se convierte en el primer DB5 nuevo que fabrica la compañía en más de medio siglo… casi nada.
Y es que el DB5 es uno de los modelos deportivos clásicos más aclamados de la historia y es sin duda un sinónimo de estilo y elegancia atemporal que se ha convertido en una auténtica joya para los amantes de este tipo de coches. Parte de esa elegancia y refinería le viene dada por el dueño más famoso que ha tenido este modelo: el espía británico James Bond, el cual condujo este precioso deportivo por primera vez en la película de 1964, Golgfinger.
Nuevo tras más de medio siglo
Ahora, 55 años después del último DB5 nuevo que se fabricó, la firma británica está manos a la obra con una serie especialmente limitado de nuevos modelos DB5. Estos han sido creados junto con la productora de las películas de Bond, EON Productions, e incorpora, además de su inconfundible presencia y estilo, una serie de artilugios y armas que se vieron por vez primera en la gran pantalla.
Los modelos de serie incluyen toda una serie de dispositivos funcionales que han sido creados por el supervisor de efectos especiales de las películas del agente especial 007. La lista de dispositivos incluye en el exterior:
– Sistema de pantalla de humo trasero
– Sistema simulado de entrega de aceite trasero
– Placas de matricula giratorias tanto adelante como atrás
– Ametralladoras simuladas de doble frente
– Escudo antibalas trasero
– Arietes delanteros y traseros
– Panel de techo del asiento del pasajero extraíble
En la zona del habitáculo los artilugios y gadgets continúan, teniendo entre ellos:
– Mapa con radar simulado de seguimiento de pantalla
– Teléfono en la puerta del conductor
– Botón actuador en la palanca de cambios
– Armas ocultas bajo el asiento
– Mando a distancia para activación de sistemas
Cada uno de estos 25 coches es una réplica detallada y auténtica del DB5 que se vio en pantalla y todos estos coches se construyen sobre una única especificación de color, la pintura Silver Birch, igual que el original.
Bajo el capó, estos DB5 Goldfinger Continuation esconden un motor de 4 litros con aspiración natural y seis cilindros en línea que es capaz de entregar 290 CV de potencia. Esta se empareja a una caja de cambios manual ZF de cinco velocidades que envía toda ella a las ruedas posteriores.
