Ante ti tienes la nueva generación del Audi A5 Coupé, un deportivo cuya familia se incrementará en un futuro no muy lejano en forma de nuevos Audi A5 Cabrio y Audi A5 Sportback, al igual que sucede actualmente con el Audi A5 Coupé que aún se comercializa (este llega en julio pero las entregas se esperan para el mes de noviembre) desde el pasado 2007, aunque cuatro años más tarde sufrió una completa actualización.
Como sucede con su predecesor, este nuevo Audi A5 Coupé toma la base del Audi A4, por lo que adopta la nueva plataforma MLB, en la que se utilizan materiales más ligero, de forma que este deportivo es hasta 60 kilos menos pesado que su antecesor. Además de ello, incorpora lo último en tecnología, propulsores y sistemas de seguridad activa.
Ligeramente más largo que antes
Aunque a primera vista puede parecer que se trata de una nueva actualización, la verdad es que estos Audi A5 Coupé son completamente nuevos. Si diseño exterior es semejante a los últimos productos de la firma de los cuatro aros, mientas que no faltarán diferentes colores para su exterior, infinidad de llantas de aleación, paquetes deportivos S line… Estos nuevos Audi A5 Coupé son más grandes que su antecesor, pues la longitud pasa de 4,63 a 4,67 metros. Ahora bien, su anchura y altura permanenen sin cambio alguno. Del mismo modo, cuenta con un coeficiente aerodinámico de 0,25, récord en su segmento (antes tenía un Cx de 0,29).
Una vez dentro, hereda el salpicadero de los nuevos Audi A4 lo que es sinónimo de ergonomía y calidad. Su pantalla central TFT puede ser de 7 u 8,3 pulgadas y se controla desde el nuevo mando central del sistema MMI. Tras su deportivo volante se puede optar por el nuevo Audi Virtual Cockpit, una pantalla TFT de 12,3 pulgadas que se puede configurar al gusto del conductor y que presenta indicadores adicionales en los Audi S5 Coupé.
Más espacioso y funcional
La llegada de la plataforma MLB le permite estirar su distancia entre ejes y proporcionar más espacio en su habitáculo, sobre todo en las plazas posteriores, realmente justas en su antecesor. Su maletero gana 10 litros de capacidad y crece hasta los 465 litros. Para ganar funcionalidad, su respaldo trasero se puede abatir en tres partes 40:20:40.
A nivel de propulsores, la gama inicial cuenta con tres propulsores diésel y otros tres propulsores de gasolina. Entre los primeros encontramos el eficiente 2.0 TDI 190 CV, una mecánica que tendrá una variante Ultra de menor consumo aún. Se podrá pedir sólo con tracción delanter y su cambio puede ser manual o S tronic de 7 velocidades.
Por encima aparece el 3.0 V6 TDI que se encuentra disponible con 218 y 286 CV de potencia. El de acceso se podrá solicitar con cambio manual o S tronic, además de con tracción delantera o quattro. Esta última sólo está disponible para el más potente, que además se comercializará con un cambio Multitronic de 8 velocidades.
Si nos trasladamos a sus gama de motores de gasolina, la gama comienza con el 2.0 TFSI de 190 CV, una mecánica que también estará disponible en versión Ultra. Asociados a la tracción delantera, se podrán adquirir con cambio manual o S tronic. Por encima aparece una variante de este 2.0 TFSI pero potenciada hasta los 252 CV, que sólo se puede adquirir con cambio S tronic, pero con tracción delantera o quattro. Como tope de gama encontramos por el momento y hasta la llegada del Audi RS5 Coupé, este 3.0 V6 TFSI, un corazón que comparte con los Audi S4 y que es capaz de generar una potencia de 354 CV, de forma que le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos. Como todo modelo «S», sólo está asociado a la tracción quattro, que siempre se podrá solicitar con un diferencial trasero activo como opción.
En materia de seguridad activa no faltarán sus efectivos faros con tecnología Matrix LED o un sinfín de diferentes asistentes a la conducción heredados de sus hermanos mayores.