comscore

Audi A7 Sportback 2018. ¿Cuánto se acerca al coche ideal?

Para los amantes de la conducción, la moda de los crossover (que no deja de ser una mezcla de conceptos en los que siempre está presente una carrocería alta) es un pequeño sacrilegio. Porque al hablar de conducción, de prestaciones, pero sobre todo de sensaciones y de confort, lo más cercano a la perfección -o al ideal, porque perfección parece un término demasiado absoluto- es una carrocería baja; posiblemente una berlina de considerables medidas. Si es con un cierto aire coupe, mejor; y si tiene la capacidad de maletero de un familiar, la cosa ya riza el rizo… Solo faltaría que la altura fuese la de un SUV para que a la hora de entrar o salir de él, no nos acordáramos permanentemente de que cada año que pasa somos un año más mayores… Pero tener eso es imposible. Por eso nos centramos en ese 'crossover' que mezcle habitabilidad, con deportividad y comportamiento dinámico.

Ese tipo de coche no existía hasta hace unos años, cuando las marcas alemanas, empezando por Mercedes con el CLS siguiendo por Audi con el A7 Sportback, no se inventaron una berlina de aire deportivo por su silueta, pero con la versatilidad de un familiar gracias a sus cinco puertas y a un portón trasero que da acceso a un maletero en el que cabe todo lo de una familia. Y con ello se reinventó el concepto de berlina deportiva; pero también el de berlina y el de deportivo. Porque una berlina, desde ese momento dejaba de ser un 'coche de padre' de aspecto clásico y tradicional. Y un deportivo pasaba de ser un coche pequeño, bajito e incómodo de acceder. Y en ambos casos sin perder la esencia de cada tipo de coche. La berlina te permite transportar a la familia con máxima comodidad y el deportivo te permite disfrutar de una conducción donde el aspecto dinámico tiene gran peso.

Desde ese dia por tanto, los que buscaban un deportivo no estaban obligados a renunciar al espacio y los que ponían el ojo en una berlina no tenian que decir adiós al carácter y el comportamiento de un deportivo. La fórmula ha funcionado; tanto que de la anterior generación del A7 Sportback se han vendido 200.000 unidades -es verdad que del Audi A6 de la actual generación se vendieron un millón de unidades, pero para ser un 'coche de nicho' esos 200.000 son una cifra muy importante- y con este nuevo A7 Sportback, el reto es superar esos datos. Pero sobre todo, seguir manteniendo viva la bandera de esa relación deportividad-confort que ahora tiene más importancia, si cabe, porque ya no son solo Mercedes y Audi los que compiten aquí. BMW con el Serie 6 Gran Coupé o Porsche con el Panamera, son rivales duros de pelar.

Por eso en Audi han puesto toda la carne en el asador. Y el nuevo modelo se acerca, posiblemente a lo que es un coche ideal… Siempre que lo veamos desde esa combinación entre berlina y deportivo. Pero ¿cuánto? Vamos a analizarlo después de nuestra primera toma de contacto con él en Sudáfrica.

Estilo exterior: 7

Pasado el efecto sorpresa de la primera generación, el rediseño del A7 Sportback nos trae un coche totalmente nuevo, es cierto, pero que se parece tremendamente al actual; aunque si los ponemos uno al lado del otro las diferencias se multiplican. Audi, por tanto, no arriesga en el estilo; una estrategia que le va bien en el resto de su gama. Su poderoso frontal con la nueva parrilla y la trasera con las luces integradas que recorren la carrocería en una línea de lado a lado son lo más diferente a primera vista. Y la caída del techo sigue recordándonos a un coupé diferente. Los casi cinco metros (4,969) de longitud, lo casi dos de anchura (1,9) y los 1,4 de altura, componen una silueta de coche asentado a la perfeccion sobre la carretera.

Habitabilidad: 8,5

Visto con los ojos del que busca una berlina, posiblemente el A7 dé respuesta a todas las necesidades. El coche crece por fuera, en longitud, 12 centímetros, pero que se convierten en 21 cuando vemos las cotas interiores, lo que aumenta su habitabilidad y espacio para viajar a todo confort… pero solo 4, porque pese a que está homologado para cinco ocupantes, el de la plaza central trasera no lo va a tener fácil debido al voluminoso túnel de transmisión. El maletero de 535 litros -ampliable hasta los 1.390- y un portón enorme para acceder a él redondean un aspecto en el que brilla este A7 Sportback.

Estilo y funcionalidad interior: 9

El diseño es opinable y a todas las opiniones hay que darles el mismo valor. Pero la ergonomía, la calidad de acabado y la funcionalidad brillan en este A7 en el que desde el primer momento uno siente que está en 'su coche de toda la vida'. Todo está en el sitio que debería estar y todo se maneja de manera intuitiva y muy racional. Incluso las dos pantallas táctiles -la de abajo dedicada a la climatización y la de arriba al resto de sistemas de infoentretenimiento- son fáciles de utilizar, pues tienen un click que te avisa de que has acertado al pulsar sobre la función que estabas activando. Calidad de acabados sobresaliente y un equipamiento de primer orden.

Comportamiento dinámico: 9

Las medidas exteriores del coche hacen que el A7 Sportback deje huella sobre la carretera. Ofrece un aplomo sobresaliente, en el que se mezclan un confort de marcha de alto nivel con un comportamiento digno del mejor deportivo. Cuenta con cinco modos de conducción, desde el que prima la eficiencia al Dynamic, en el que se apuran más los cambios de marcha, se endurecen suspensiones y el giro de volante se hace más firme. Y si a eso le sumamos la tracción quattro -de serie-, la dirección activa a las cuatro ruedas (opcional) en la que las ruedas del tren trasero giran en el mismo sentido que las delanteras o en sentido opuesto, en función de la velocidad para mejorar agilidad o la también opcional suspensión de amortiguación variable, vemos que pocos coches se acercan a lo que puede ofrecer este A7… Y lo corroboramos en nuestro recorrido.

Ayudas a la conducción: 9

Si hace unos días conducíamos el Audi A8 y lo definíamos como el modelo más avanzado del mundo, del A7 Sportback podemos decir básicamente lo mismo… Porque el sedán deportivo de Audi cuenta con los mismos elementos que han llevado al A8 a lo máximo. Nada menos que 39 pueden ser los diferentes sistemas de ayuda a la conducción que incorpore el A7. Todo ello gracias a un controlador central de asistencia al conductor (zFAS), que en la versión más completa incluye cinco sensores de radar, un escáner láser, una cámara frontal, cuatro cámaras de visión 360 grados y doce sensores de ultrasonidos. Con semejante batería de 'ojos', los dos del conductor parecen una ridiculez. Y entre esos sistemas, uno nuevo, que permite aparcar o salir de un aparcamiento manejando el coche desde un smartphone.

Gama mecánica: 7 (por ahora)

La gama que llega a partir de marzo se compone únicamente de dos variantes, un gasolina 55 TFSI de 340 caballos y un diésel (50 TDI) de 286 caballos. Ambos de seis cilindros, ambos con tecnología Mild Hybrid -cuenta con una batería de 48 voltios que controla sistemas auxiliares y que permite la máxima recarga de las baterías del coche y, por tanto, el mayor ahorro-, son un gran comienzo para la futura gama. Pero colocan el listón muy alto. Cuando lleguen el resto de motorizaciones -aún sin confirmar- entre los que habrá propulsores de 4 cilindros y de rendimiento más ajustados posiblemente la nota suba. Y este 7 no significa que no nos gusten los motores que ofrece. Los 250 km/h de velocidad máxima en ambos o los 5,3 segundos para el 0 a 100 del TFSI (5,7 en el TDI) son cifras excelentes. Y la suavidad de funcionamiento, elasticidad y empuje que demuestran son de nota. Y el cambio S tronic de 7 velocidades en el TFSI y Tiptronic de 8 en el TDI son la guinda.

Eficiencia y consumo: 8

Con cinco metros de coche y la más que respetables potencias que ofrecen, está claro que no se pueden hacer milagros a la hora del consumo. Pero gracias a la tecnología mild hybrid, que suma una batería de 48 voltios y un alternador de 12 que permiten la máxima recarga gracias a la energía generada en las frenadas -unido a un start stop que empieza a funcionar por debajo de 22 km/h- dan como resultado una cifra de consumo más que aceptable, desde 6,8 l/100 km de consumo combinado en el gasolina (en función de la medida del neumático) y desde 5,6 en el diésel. Esa tecnología mild hybrid permite también por ejemplo, circular 'a vela' entre 55 y 160 km/h al levantar el pie del acelerador, lo que genera un ahorro importante. Un dato más: si en el A8 todo este concentrado de tecnologías ha hecho que merezca la etiqueta ECO de la DGT (que permite entrar en las ciudades incluso en episodios de alta contaminación), posiblemente, este A7 Sportback esté en el mismo caso.

Precio: 5 (sin comparar con sus rivales), 9 (comparándolo)

Me cuesta mucho puntuar este apartado. Evidentemente, un coche con toda la tecnología que ofrece este A7 Sportback ni es barato ni puede serlo. Pero claro, si lo comparas con sus rivales, la cosa puede cambiar. El nuevo Audi llega en marzo al mercado por un precio de 76.860 en la versión 50 TDI (recordemos: 286 caballos, tracción total, cambio Tiptronic…) y de 81.520 euros para el 55 TFSI (340 caballos, tracción total, cambio S Tronic…). Precios un poco prohibitivos, sí; pero en línea o mejores que su competencia (el equivalente en BMW, el Serie 6 Gran Coupé con tracción total y cambio automática cuesta 76.900 en su versión diésel de 265 caballos y 83.000 euros en la de gasolina con 340 CV). Si miramos en Porsche, el Panamera más barato (con 330 CV y sin tracción total) ya vale más de 100.000 euros. Y Mercedes ofrece un CLS 350d 4Matic con 286 caballos por 77.500 euros; 100 euros más de lo que cuesta el 450 4Matic con 367 caballos.