Hace unos cuantos años la firma de los cuatro aros se la jugaba lanzando al mercado su exclusivo Audi R8 RWS, una criatura cuyo detalle más característico era el que prescindía de su exitoso sistema de tracción total quattro, pues la energía de su 5.2 V10 FSI se enviaba exclusivamente a sus dos neumáticos posteriores.
Pero ahora el actualizado Audi R8 revive esa animada versión 'todo atrás', pero en este caso no será como edición limitada (de aquellos RWS se fabricaron solo 999 ejemplares), sino que se unirá a los quattro ya existentes y entrará en producción a finales de este mismo año.
Coupé y Spyder
Estas máquinas también varían su denominación porque ahora pasan a llamarse V10 RWD y para diferenciarse del resto de los R8, estas criaturas lucen unas tomas de refrigeración específicas, un difusor trasero diferente, tubos de escape ovalados, exclusivas llantas forjadas de 19 pulgadas con gomas 245/35 delante y 295/35 detrás… Como opción se ofrecen otras llantas de 20 pulgadas, así como diferentes paquetes estéticos (incluido uno en fibra de carbono) que realzan la exclusividad de este deportivo alemán, que estará disponible con carrocería Coupé y Spyder.
Decir que el tono Kemora Grey también está disponible ahora para esta criatura con propulsión posterior.
El interior es calcado al del resto de los R8, salvo por el detalle 'RWD' que se plasma en la placa colocada frente al asiento del acompañante.
Se conforman con 540 CV
Mecánicamente no hay sorpresas, porque en posición central sobre su chasis ASF que combina el aluminio y la fibra de carbono (tiene un reparto de pesos 40:60) es donde se coloca el conocido propulsor 5.2 V10 FSI atmosférico, que proporciona 540 CV de potencia y 540 Nm de par motor. Son 30 CV menos que las versiones 'light' de los R8 equipados con tracción quattro (los Performance se van hasta los 620 CV) y justo lo mismo que proporcionaba en los exclusivos R8 RWS. Eso sí, se mantiene un cambio automático S tronic con 7 velocidades y llega un avanzado diferencial trasero mecánico para controlar los embites de su eje posterior cuando te de por tocar botones y desconectar su control de estabilidad y de tracción.
Gracias a eliminar la tracción quattro se consiguen ahorrar 65 kilos de peso en los Coupé y 55 kilos en el caso de los Spyder, que ahora se conforman con 1.595 y 1.695 kilos respectivamente en vacío, por lo que sus prestaciones son sensacionales.
Los Audi R8 V10 RWD Coupé pueden acelerar de 0 a 100 km/h en 3,7 segundos, que son tres décimas más de lo que necesita la versión quattro, más potente y con mejor tracción desde cero. Ahora bien, su velocidad máxima es de 320 km/h, que se quedan en 318 km/h en el caso de los Spyder, que demandan 3,8 segundos para poder acelerar de 0 a 100 km/h.
Esta versión también se convierte en la más accesible, porque el Coupé tiene un precio en Alemania de 144.000 euros, mientras que el Spyder asciende hasta los 157.000 euros. En España no se han desvelado sus precios por el momento, pero allí significa ahorrarse nada menos que 22.000 euros en ambos casos respecto a la versión quattro.
