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Audi R8 V10 Decennium. Por otros diez años de 5.2 V10 FSI

Corría el año 2006 cuando la firma de los cuatro aros lanzaba al mercado su deportivo Audi R8, una criatura que inicialmente estaba disponible en exclusiva con el corazón 4.2 V8 FSI. No sería hasta el 8 de diciembre de 2008 cuando Audi anunció que a este deportivo llegaría una mecánica más potente. Se trataba de un propulsor 5.2 V10 de aspiración natural que debutó en enero de 2009 en el Salón de Detroit.

Desde entonces han pasado diez años, por lo que la casa alemana ha decidido rendir homenaje a este impresionante motor que es un 'rara avis' en los tiempos que corren y que también han utilizado los Lamborghini Gallardo y Lamborghini Huracan.

Sólo fabricarán 222 unidades

Y lo celebra con este exclusivo Audi R8 V10 Decennium, una edición limitada de la que sólo se van a fabricar 222 ejemplares sobre la base del renovado Audi R8 V10 Performance y con carrocería Coupé.

Este ejemplar está pintado en este color gris Daytona mate, aunque los clientes también podrán elegir su Decennium en colores Ascari Blue, Kemora Gray, Mythos Black, Forest Silver y Suzuka Gray. Todos ellos lucirán en su exterior detalles en negro brillante, como el splitter delantero o el difusor posterior, pasando por los emblemas exteriores.

Un detalle único son el que sus llantas de 20 pulgadas están terminadas en color bronce, así como los colectores de admisión de su corazón 5.2 V10 FSI, que no sufre variación alguna, generando una potencia de 620 CV y un par motor de 580 Nm. Todo ello se envía a sus cuatro ruedas a través de una transmisión S tronic de 7 velocidades, lo que le ayuda a alcanzar una velocidad máxima de 331 km/h y acelerar de 0 a 100 km/h en sólo 3,1 segundos.

Tiene detalles únicos

Audi también personaliza el interior de esta edición especial, que presenta molduras en fibra de carbono brillante y un tapizado en cuero y alcántara de color negro con pespuntes en color bronce, los cuales también se trasladan al selector del cambio, los paneles de las puertas y a su volante envuelto en alcántara. También en su interior hay emblemas específicos en los umbrales de las puertas de fibra de carbono, las puertas y la moldura tras el selector del cambio.

Por último, un LED colocado en sus retrovisores proyecta sobre el asfalto una inscripción que hace alusión a la exclusividad de este deportivo alemán, que precisamente en Alemania tiene un precio de 222.000 euros, 22.000 más que un Audi R8 V10 Performance. Pero la funda especial con la que lo puedes cubrir cuando no lo uses igual ayuda a justificar ese precio extra.