Corría la década de los años '30 cuando la firma Horch, una de las marcas originales que se fusionaron para dar lugar al nacimiento de Audi, lanzó al mercado el 853 roadster, una auténtica obra de arte que setenta años después (en el año 2009 concretamente) se hacía con el galardón del vehículo más bello en el Concurso de Elegancia de Pebble Beach.
Aquel icónico vehículo de 5,23 metros de largo y que escondía bajo su capó un corazón con ocho cilindros en línea y cinco litros de cubicaje, ha inspirado al centro de diseño que la casa alemana tiene en Malibú, California, de donde ha salido este Audi skysphere Concept, que está llamado a redefinir la manera de viajar.
Se desvela el 13 de agosto en Pebble Beach
Y precisamente en Pebble Beach, dentro de la Semana del Automóvil de Monterey, será donde el 13 de agosto vea la luz este sublime prototipo.
Más allá de un largo capó y de unas dimensiones exteriores propias de lo que se esperaría en una berlina de representación, este Audi skysphere concept es lo único que comparte con aquel mítico icono del automovilismo de la época brillante del 'Art Decó', porque sus líneas exteriores marcan el camino que van a seguir los futuros modelos de producción de la casa de Ingolstadt, los cuales estarán totalmente electrificados, de forma que su parrilla Singleframe adquiere una nueva función puesto que ya no se necesitarán grandes tomas para refrigerar las actuales mecánicas térmicas. En su lugar esa superficie se inunda de la más avanzada tecnología LED, que se encuentra presente en las cuatro esquinas de este skysphere concept, que ha sido esculpido en el túnel del viento y cuya zaga luce una mezcolanza entre un speedster y un shooting brake gracias a una cubierta translúcida bajo la cual se esconden dos bolsas de viaje especialmente concebidas para él y que se sujetan con unas correas que se tensan en forma de cruz.
Ese avanzado sistema de iluminación LED digital no solo promete convertir la noche en día, además de poder interactuar con el resto de usuarios de la vía, al igual que tampoco se conforma con atraernos con una envaucadora coreografía que tiene lugar al abrir o cerrar el vehículo. Esas luces incluso son capaces de advertirnos de la metamorfosis exterior que puede experimentar este sofisticado prototipo.
Una carrocería camaleónica
Los ingenieros de Audi se han quebrado la cabeza para desarrollar un vehículo cuya longitud exterior puede variar entre 4,94 y 5,19 metros (también mide 2,0 metros de ancho y 1,23 metros de alto). Prácticamente le permite oscilar entre lo que mide un Audi A7 Sportback (4,97 metros) y un Audi A8 (5,17 metros). Y esto no ocurre precisamente para poderlo aparcar en sitios más reducidos. Esa capacidad de transformación le permite variar por completo su experiencia de conducción, pasando de las sensaciones que puede transmite un e-roadster en su modo de conducción 'Sport', al máximo confort de un GT en su programa 'Gran Turismo', en el que además ofrece un sistema de conducción autónoma de Nivel 4. Al seleccionar este último la distancia entre ejes se alarga 250 milímetros para ofrecer valores equiparables a los de un A8 L (no se dan dimensiones concretas, pero hablaríamos de 3.128 milímetros), sus asientos vestidos en microfibra de producción sostenible y especialmente diseñados para funcionar como un deflector para el viento se retrasan, sus pedales y volante se ocultan… Y así arranca un viaje sensorial nunca antes experimentado a bordo de un descapotable, y donde conductor y acompañante podrán interactuar con el ecosistema digital que encierra este Audi skysphere concept, además de disfrutar sin preocupaciones de un placentero viaje al aire libre… y en primera clase. No en vano, su equipo de sonido de alta fidelidad, como sus suspensiones neumáticas adaptativas ayudarán a evadirnos de las posibles irregularidades que puedan aparecer a nuestro paso.
Sin embargo, al seleccionar el programa de conducción 'Sport' la batalla de este skysphere concept se iguala a la de un Audi RS 5 Coupé, condicionando su comportamiento dinámico. Por si esto no fuera suficiente en su habitáculo, presidido por una enorme pantalla que mide 1.415 milímetros de ancho y 180 milímetros de alto, emerge un volante y unos pedales para dar el control a su afortunado conductor. Esas confortables suspensiones neumáticas se tornan más firmes y acercan su carrocería 10 milímetros al asfalto, al igual que la dirección sobre el eje trasero también es más directa (recurre a un sistema 'by-wire' sin conexión mecánica y totalmente configurable para adaptar su dureza, recuperación y vueltas entre topes). Entonces se podrá disfrutar de las prestaciones que otorga su único motor eléctrico, que va colocado sobre el eje posterior y que es capaz de generar unos asombrosos 465 kW de potencia, el equivalente a unos 632 CV, además de 750 Nm de par motor. Audi asegura que en unos 4,0 segundos es capaz de alcanzar los 100 km/h desde parado, mientras que su dinámica está asegurada gracias a detalles como un peso de 1.800 kilos o a un reparto de pesos donde el 60% recae sobre la parte posterior. Parte de esa culpa la tienen la posición elegida para sus baterías con más de 80 kWh de capacidad y que le permiten ofrecer una autonomía en ciclo WLTP superior a los 500 kilómetros cuando apostamos por el programa 'Gran Turismo'. Y es que estas tienen forma de 'T', ocupando en mayor medida la parte que hay tras sus asientos, además de encontrarse por debajo del túnel central.
El futuro 'sphere'
Como ya hemos dicho, este Audi skysphere concept simboliza el pistoletazo de salida para la nueva era que llega en Audi. Pero no lo hará solo, porque la firma de los cuatro aros ha confirmado un trío de prototipos que desvelará en los próximos meses (el último en 2022), que comienzan con esta obra de arte, pero al que seguirán los grandsphere concept y urbanshpre concept, dos prototipos que como este prometen una experiencia de conducción totalmente distinta a la que conocemos hoy día y que nos permitirán soñar con un futuro que Audi comienza a construir hoy mismo.
