Las autocaravanas están de moda. La idea de echarse a la carretera y recorrer cientos de kilómetros en uno de estos vehículos atrae a cada vez más gente, pero no es algo que todos se puedan permitir.
A raíz de la pandemia y, para evitar contactos con muchas personas, muchas personas han optado por las autocaravanas como alternativa para pasar sus vacaciones. La única pega de este tipo de vehículo es su precio.
La Xinge RV no es una copia, pero es otra alternativa para disfrutar de una autocaravana a un precio mucho más asequible: cuesta 4.500 euros.
2La expresión mínima de la intendencia
El interior de la Xinge RV cuenta por delante con un salpicadero simple en el que se ha colocado una pantalla central para manejar algún tipo de sistema de infoentretenimiento e incluso tiene una solución para los días calurosos: un ventilador pegado y apuntando al conductor.
La zona de la cabina cuenta con una pequeña pantalla para el sistema de inforentretenimiento en el salpicadero, pero, la climatización es un simple ventilador ubicado en el ángulo derecho y el asiento del conductor es una plataforma de madera con un cojín y un respaldo separado del asiento. Está claro que nadie aguantaría una larga ruta sentado ahí.
Desde la cabina se puede acceder a la zona habitable a través de una pequeña ventana, justo detrás del respaldo. Una vez en la zona de estar, se aprecia una encimera y un sofá enfrentados entre sí en la parte posterior, que se pueden convertir en una cama. Hay numerosos huecos para guardar objetos por las paredes y, en el techo, hay un maletero. De todas formas, no todo iba a ser malo: la autocaravana eléctrica china cuenta con una ducha, algo que no tienen muchas camper. Esa ducha comparte espacio con el fregadero y, como afirma Elliot, hay que desconectar la nevera antes de usarla.