El verano es sinónimo de libertad, sol y largos viajes por carretera, pero también puede ser una prueba de resistencia para tu coche. A medida que regresamos a la rutina, es crucial prestar atención al estado de tu vehículo, especialmente si ha soportado intensos calores, largas distancias y tráfico denso.
Los expertos en averías concuerdan en que hay cinco elementos clave que deberías revisar después de un verano ajetreado. Al hacerlo, te aseguras de que tu coche siga funcionando en óptimas condiciones y te evitas sorpresas desagradables en el futuro cercano.
2Filtros de partículas diésel: mantenga las emisiones bajo control
Los motores diésel, aunque eficientes, pueden enfrentarse a problemas con el filtro de partículas después de largos trayectos veraniegos. Este componente es vital para mantener las emisiones contaminantes bajo control. Cuando se obstruye, el coche pierde potencia y emite más gases nocivos. Tras el verano, es recomendable revisar y, si es necesario, limpiar o reemplazar el filtro de partículas para asegurar que su vehículo sigue cumpliendo con las normativas medioambientales y para prevenir costosas reparaciones.