¿Sabes cuántas piezas tiene un coche? Seguramente muchas más de las que crees. Se estima que el número aproximado de piezas que tiene está entre unas 70.000 y unas 90.000. Visto así parece casi un milagro que nada falle y puede concebirse incluso como algo normal que algunas de ellas se rompan.
Pero hay un problema. Hay componentes clave que cuando se estropean dan pie a graves averías. Un buen ejemplo de ello es, precisamente, el turbo que incorporan muchos de los motores diésel más modernos. Si falla puede traducirse en un daño irreversible para tu coche.
5¿Y si el coche es automático?
La siguiente pregunta es lógica porque seguramente se te ha ocurrido nada más leer la solución: ¿Qué pasa cuando el coche es automático? Pues tranquilo porque hay una solución también para estos casos. Piensa. Si el motor necesita combustible y aire, ¿qué podemos eliminar? El aire. Tapa la admisión con un trapo o una prenda, busca la caja del filtro de aire y el tubo que va desde ella hasta el motor, corta el tubo o rompe una abrazadera y tapónalo.
¿Te parecen soluciones desesperadas? Pues aún no sabes la mejor. Puede parecer loca pero hay que constatar que funciona, es así. Rocía la admisión con un extintor de CO2. Sí, has leído bien. Pero ojo, sea cual sea la opción elegida, no arranques después el motor. En ese caso solo lograrías iniciar de nuevo el proceso que estás intentado solucionar así que limítate a seguir estos pasos si quieres evitar una avería mucho mayor.