Mejor prevenir que curar… Solemos ser descuidados cuando no vemos el peligro de cerca. Nos relajamos si no somos conscientes de dónde están los problemas, pero puede que estén más cerca de lo que crees porque las probabilidades de tener que enfrentarte a averías en tu coche aumentan a medida que este se va haciendo más viejo.
Un buen mantenimiento, por tanto, es fundamental para evitar tener que efectuar una reparación de tu vehículo, que podría resultarte demasiado costosa dada su antigüedad, o que una inoportuna avería ponga en peligro tu seguridad y la del resto de personas que viajen contigo en ese momento.
5Neumáticos
Nunca salgas a la carretera sin una rueda de repuesto o un kit temporal de reparación de pinchazos en el coche porque el resultado puede ser terrible. Aunque la avería de los neumáticos es causada generalmente por escombros u otros objetos que haya en medio de la carretera, también puede darse por sobrecalentamiento en verano, al tener el suelo una temperatura elevada que aumenta el riesgo de que suframos un reventón.
Comprueba la presión de los neumáticos y el estado de las llantas de tu vehículo cada vez que eches gasolina. Si uno necesita aire regularmente o tiene un pequeño pinchazo o, incluso, un problema con la válvula, lo mejor es llevarlo al taller para que lo sustituyan.