Fue en 2019 que los limites de velocidad en carreteras convencionales se modificaron para reducir los efectos de la siniestralidad en las estadísticas de victimas mortales por causa del exceso. Y un año después, esta reducción, se aplicó a los limites en ciudad, con la misma intención, además de intentar activar políticas de carácter comunitario frente a las emisiones de gases en centros urbanos sobrecargados.
A fecha de hoy, ya son varias las organizaciones civiles de consumidores, entre las que destacan los talleres asociados, y desde las que se pone de manifiesto la implicación mecánica de estos limites bajos de velocidad, y otras de carácter publico, como la Federación de Municipios, desde la que no se renuncia a seguir con estos limites, ya que se ha detectado la efectividad en cuanto la reducción de siniestros de gravedad, en un 10 %.
2Circulando a 30 km/h por la ciudad
Además, también especifican a qué vehículos les afecta más mecánicamente el circular a 30 km/h, siendo los vehículos de motorización diésel equipados con filtros de partículas para reducir su contaminación. Esto se produce debido a que, al conducir con un bajo régimen de vueltas del motor, las impurezas no se expulsan de los conductos, se van acumulando y pueden obstruirlo y provocarle daños.
Por su parte, el embrague se puede dañar debido a que haya que circular en marchas más cortas y con un mayor uso y esfuerzo para este elemento, algo que puede provocar por consecuencia otra avería en la válvula EGR, que se encarga de recircular los gases del escape.