Se han establecido “zonas 30” a lo largo de todas las urbes españolas, pero algunas han ido un paso más allá estableciendo este límite de velocidad de 30 km/h entodas sus calles. Es el caso, por ejemplo, de las ciudades de Bilbao o León, donde a la entrada se puede ver una señal amarilla grande que establece la limitación a 30 en todo el núcleo urbano.
Esta limitación tiene sus considerables pros, pero para muchos vehículos que conducen habitualmente por ciudad puede traducirse en averías.
1Zonas 30 por todo el país
Desde el 11 de junio muchas ciudades tienen límite de velocidad a 30 km/h en la mayoría de sus calles. Esta medida reduce enormemente la siniestralidad: a menor velocidad menor gravedad en los accidentes y atropellos. Además, los conductores tienen mucho más capacidad de reacción que yendo a 50 km/h. Otro aspecto positivo es una menor contaminación al circular.
Pero no todo son ventajas. El conductor gana en seguridad, pero también en averías. Los coches de España, en su mayoría antiguos, no han sido diseñados para circular constantemente a una velocidad tan reducida. Forzar la primera marcha o circular con el coche ahogado a la larga te puede producir las siguientes averías.