El nuevo año debería traer consigo las temidas Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) en todas las ciudades españolas con más de 50.000 habitantes empadronados. Esto suponía la creación de más de 150 ZBE en todo el país, un cambio para el que no parecen estar preparados la mayoría de ayuntamientos.
Son muy pocos los consistorios que se han interesado tempranamente por esta imposición anticontaminación y los proyectos para crear nuevas ZBE en la mayoría de ciudades españolas apenas están desarrollados, o directamente son inexistentes. Se supone que la Ley 07/2021 de Cambio Climático y transición energética, obligaba a estos municipios con más de 50.000 habitantes a la implantación de al menos una ZBE por ciudad a partir de 2023, pero este objetivo está muy lejos de cumplirse.
3Muchos ciudadanos desconocen que se van a crear ZBE en sus ciudades
La medida de contar con Zonas de Bajas Emisiones, ya en 2023, en 150 ciudades españolas era un objetivo muy ambicioso y, finalmente, será imposible de cumplir. El alcalde de Irún y presidente de la Comisión de Transportes, Movilidad Sostenible y Seguridad Vial de la FEMP, José Antonio Santano, considera que «implantar las ZBE requiere de mucha información al ciudadano. Lo razonable, y en eso estamos de acuerdo todos los alcaldes, es darnos 2023 para preparar las ordenanzas».
La labor de información al ciudadano ha sido muy escasa por parte de las entidades gubernamentales, y muchos desconocen que en su ciudad se va a crear este tipo de áreas y a quiénes van a afectar. Estas ZBE pueden crear un caos circulatorio teniendo en cuenta que se va a concentrar el tráfico de los coches más contaminantes en las afueras de estas zonas restringidas. También será necesario aclarar puntos clave, como qué pasa con los residentes, la carga y descarga o con los ciudadanos con problemas de movilidad.