comscore

El gigante petrolero que se la juega comprando Ballenoil porque el 50% de los conductores quiere repostar en una ‘low cost’

El mercado de los combustibles está experimentando una transformación significativa, donde las estaciones de servicio llamadas low cost están ganando terreno frente a los gigantes del sector.

La reciente adquisición de Ballenoil por parte de Cepsa refleja la estrategia de las compañías para adaptarse a la preferencia creciente de los conductores por las gasolineras independientes. ¿Cómo ha llegado la industria a este punto y cuáles son las implicaciones de esta situación?

3
Cepsa y la estrategia de dos marcas dentro de un mismo grupo

gasolina multa

La adquisición de Ballenoil por parte de Cepsa se alinea con una estrategia común en otros sectores: ofrecer dos marcas de distinta gama dentro de un mismo grupo. Ejemplos de éxito de este modelo se encuentran en el transporte (Iberia e Iberia Express), la automoción (Renault y Dacia) y la telefonía (Xiaomi y Poco).

Cepsa busca mantener la diferenciación entre ambas marcas, aprovechando la clientela cautiva de Ballenoil. La red de estaciones de esta última tiene planes de crecimiento, apuntando a alcanzar las 500 estaciones en 2027. Además, Cepsa aspira a convertir a Ballenoil en un referente en sostenibilidad en el segmento low cost, incorporando puntos de recarga eléctrica y promoviendo la venta de biocombustibles.