La determinación de algunos compradores de automóviles no tiene límites, pero en ocasiones puede tomar rumbos insospechados. En Gainesville, Florida, un joven de 20 años llamado Kevin Leiman acudió a un concesionario de BMW con la intención de adquirir un flamante M4 CS, un vehículo de alto rendimiento con 543 caballos de fuerza y un precio que supera los 125.000 dólares. Sin embargo, lo que comenzó como una simple visita terminó convirtiéndose en un suceso insólito.
Leiman, confiado en su capacidad para comprar el automóvil, solicitó financiamiento para cerrar el trato, pero el banco le negó la solicitud tras no aprobar la verificación de crédito. Para empeorar la situación, el concesionario tampoco le permitió probar el coche, lo que pareció afectar profundamente al joven. En lugar de aceptar la negativa y retirarse con calma, según informes de WCJB, decidió tomar una medida desesperada.
La locura del joven para obtener el BMW
El joven intentó tomar las llaves del M4 CS sin permiso, pero los empleados del concesionario intervinieron a tiempo y lo detuvieron. Ante la imposibilidad de llevarse el coche en ese momento, Leiman regresó a su vehículo y permaneció en él durante un tiempo. Acto seguido, realizó dos vueltas alrededor del concesionario como si estuviera planeando su próximo movimiento.
Lo que ocurrió después dejó a todos atónitos. Leiman pisó a fondo el acelerador de su propio auto y embistió la sala de exposición del concesionario. Los cristales estallaron en mil pedazos, generando una escena caótica. Tras salir de su automóvil, el joven volvió a su objetivo inicial: encontrar las llaves del BMW M4 CS. Sin embargo, nuevamente falló en su intento, por lo que decidió huir a pie del lugar.
¿Cómo terminó todo para el joven que quiso robar el BMW?
La policía de Florida lo detuvo poco después y lo arrestó bajo los cargos de hurto mayor de automóvil y daños a la propiedad. Se estima que los destrozos ocasionados en el concesionario ascienden a unos 60.000 dólares. Afortunadamente, no hubo heridos y la estructura del edificio no sufrió daños significativos. Sin embargo, la historia de este incidente no terminó ahí.
Un usuario de Bimmerpost compartió imágenes del incidente, en las que se observa a los empleados del concesionario perplejos ante la destrucción. Aunque el BMW M4 CS no fue alcanzado directamente por el vehículo de Leiman, probablemente sufrió daños en la pintura debido a los fragmentos de vidrio. Curiosamente, el concesionario aún ofrece el automóvil en venta por 129.175 dólares, con una historia única que seguramente quedará grabada en la memoria de todos los involucrados.