Debemos decir, que el coche de producción más rápido del planeta es el SSC Tuatara, que ha alcanzado la extraordinaria velocidad máxima de 532 km/h y ha establecido el récord de 508 km/h. De esta manera, supera la anterior plusmarca, que poseía el Bugatti Chiron Super Sport 300+ con 490 km/h. Asimismo, la cifra se ha logrado en una carretera pública a las afueras de Las Vegas (Estados Unidos) y con el piloto Oliver Webb conduciendo este vehículo. Para aprobar este logro, se realizaron dos lanzamientos en direcciones opuestas: en la primera se alcanzó una rapidez de 484 km/h y en la segunda el registro de 532 km/h, por lo que se toma como marca la media entre ambas. Con ello, se elimina el efecto del viento o las pendientes.
Sin embargo, según los directivos de SSC North América piensan que es posible conseguir una velocidad superior. Así lo ha reconocido el propio conductor del ejemplar, que afirmó: «definitivamente había más ahí. Y con mejores condiciones, sé que podríamos haber ido más rápido. A medida que me acercaba a los 500 km/h, el SSC Tuatara subió casi 32 km/h en los últimos cinco segundos. Todavía estaba tirando bien. Los vientos cruzados nos impidieron darnos cuenta del límite del coche». Este «misil» fue capaz de este récord, gracias a su propulsor de gasolina V8 biturbo de 6 litros, que ofrece 1.775 CV de potencia cuando se le alimenta con combustible bioetanol E85, y a su impresionante aerodinámica, con un Cx de tan solo 0,279, una de las cifras más bajas de la industria.