Las bicicletas eléctricas son un medio de transporte más, que contribuye a la movilidad sostenible dentro de las grandes urbes. Hay ciudadanos que directamente poseen una en propiedad y la utilizan con frecuencia, y otros que prefieren alquilarlas. La diferencia principal respecto a los modelos convencionales es que disponen de pedaleo asistido, de manera que se reduce de una manera considerable el esfuerzo.
6Medidas antirrobo de baterías
Los robos de bicicletas están a la orden del día, más aún si son de alta gama o bicis eléctricas, sobre todo si son nuevas. No son pocos los robos en tiendas de ciclismo que se han vivido en los últimos meses, la mayoría centrados en E-bikes.
Este tipo de robos, bien premeditados y estudiados, son difíciles de evitar. Los ladrones son capaces de inutilizar y evitar los sistemas de seguridad como alarmas, cámaras de vídeo o grandes rejas, candados y cerraduras. Pero hay otros pequeños detalles, que aunque no eviten el robo, si dificulta mucho la tarea posterior a los ladrones cuando intentan colocar las bicicletas en el «mercado».
Una bicicleta eléctrica sin batería es prácticamente inútil. Si además no tiene cargador, más aún. Seguro que te preguntarás, ¿pero la van a robar igualmente?. Sí, es cierto, pero si se guardan las baterías y los cargadores en otro local o en casa, se la llevarán sin ellos.