comscore

El día que BlaBlaCar va a ir mucho más allá de las cuatro ruedas

BlaBlaCar ha revolucionado la forma en que entendemos los viajes compartidos, pero ahora está dando un paso mucho más audaz: fusionar la movilidad en coche con el transporte ferroviario, uniendo caminos que hasta hace poco se mantenían separados. Con la integración de los servicios de Renfe en su plataforma, BlaBlaCar elige a España como el lugar perfecto para expandir su oferta multimodal. Esto representa un avance crucial en su objetivo de ofrecer una solución de movilidad eficiente, sostenible y conectada, que ya no se limita solo a la carretera.

La inclusión de los billetes de tren de Renfe en BlaBlaCar no es una simple colaboración; es una apuesta estratégica que sigue la línea de su enfoque en la multimodalidad, que comenzó en 2019 con la integración de autobuses. Ahora, los usuarios no pueden solo compartir coche, sino también acceder a trenes de alta velocidad, larga distancia y trenes regionales, conectando más de 1.400 estaciones en toda la península. Este movimiento refuerza la capilaridad de BlaBlaCar, facilitando conexiones punto a punto, incluso en las regiones más remotas de España.

2
España: el escenario ideal

Europa Mapa BlaBlaCar Motor16

¿Por qué España? BlaBlaCar ha identificado en nuestro país un mercado único, gracias a la liberalización reciente del sector ferroviario. Esto ha permitido que Renfe se consolide como el aliado perfecto para esta estrategia. Además, España es un referente en cuanto a sostenibilidad en el transporte, lo que coincide con los valores de BlaBlaCar de promover una movilidad más ecológica y eficiente. Con más de 1,3 millones de viajeros al día en los trenes de Renfe, la plataforma está ahora en una posición envidiable para captar a esos usuarios que buscan una alternativa flexible al coche privado o al avión.

Al integrar estos servicios, BlaBlaCar refuerza su papel como actor clave en el ámbito de la movilidad sostenible, aportando un beneficio directo al medio ambiente al reducir la cantidad de coches en carretera y las emisiones de CO2. Esta complementariedad entre trenes y coches compartidos es un ejemplo de cómo las plataformas tecnológicas pueden impulsar la eficiencia en la movilidad, unificando en un solo lugar todas las opciones posibles para los viajeros.