Cuando llegue a los concesionarios los nuevos BMW Serie 5 lo harán exclusivamente con cuatro propulsores, pues aparecerán las versiones 530i, 540i, 520d y 530d. Todos estos estarán disponibles también en combinación con la tracción a las cuatro ruedas xDrive. A comienzos de año llegarán los eficientes BMW 520d EfficientDynamics, que anuncian un consumo medio de 3,9 l/100 km, además de los poderosos BMW M550i xDrive, que con sus 462 CV de potencia es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h más rápido que un BMW M5 actual. Pero también llegará en el mes de marzo un nuevo integrante para la nueva familia BMW iPerformance, es decir, la que actualmente conforman sus modelos equipados con una mecánica híbrida enchufable.
El corazón de los BMW 330e
Actualmente la familia BMW iPerformance la forman los BMW 225xe Active Tourer, BMW 330e, BMW 740e y BMW X5 xDrive 40e, pero en el mes de marzo se sumará un quinto integrante en forma de este BMW 530e, una versión que se diferenciará de sus hermanos por añadir detalles en color azul en la parrilla delantera, los emblemas iPerformance repartidos por su carrocería, además de una nueva toma en la aleta delantera izquierda tras la que se oculta su punto de recarga.
Bajo la nueva carrocería de los BMW Serie 5 conocidos como G30, se esconde la misma tecnología que ya utilizan los mencionados BMW 330e y por ese motivo, los nuevos BMW 530e combinan un corazón 2.0 TwinPower Turbo de gasolina que proporciona 184 CV de potencia. Junto a él encontramos un segundo motor, en este caso eléctrico, que añade otros 95 CV de potencia. De forma conjunta hablamos de un total de 252 CV y un par motor de 420 Nm.
Hasta 140 km/h en modo EV
Todo ello se combina por medio de una transmisión Steptronic de 8 velocidades y su potencia es enviada exclusivamente al eje posterior. Por el momento se desconoce su peso (un BMW 330e pesa 210 kilos más que un BMW 320i automático, que es la versión de la que deriva), pero eso no ha sido problema para que firme unas excelentes prestaciones, pues estos eficientes BMW 530e serán capaces de acelerar de 0 a 100 km/h en 6,2 segundos y pueden alcanzar 235 km/h de velocidad punta. Si exclusivamente queremos circular con el motor eléctrico, en este caso, su velocidad máxima se limita a 140 km/h.
En la parte posterior es donde se ha colocado su nueva batería de ión-litio, que tiene una capacidad de 9,2 kWh frente a los 7,6 kWh que ofrecen los BMW 330e. Esta mayor capacidad incrementa su autonomía en modo EV, pues puede recorrer hasta 45 kilómetros sin consumir una sola gota de carburante. Ahora bien, es de suponer que su capacidad de maletero también se verá reducida de los 530 litros de los que presumen el resto de sus hermanos con motor térmico. Tampoco se conoce, pero su depósito de combustible también será ligeramente más pequeño que en el resto.
La combinación de sus dos propulsores le permite ofrecer una excelente eficiencia, como demuestra un consumo medio homologado de tan sólo 2,0 l/100 km, con emisiones de 46 g/km de CO2.
Estos eficientes BMW 530e llegarán a los concesionarios el próximo mes de marzo y cuando se vaya acercando esa fecha, conoceremos sus precios, pero hay que tener en cuenta que un BMW 330e cuesta 5.355 euros más que un BMW 320i automático y esa diferencia podría trasladarse a estos nuevos Serie 5.