BMW es una de las marcas que está apostando fuerte por el desarrollo de la pila de combustible para la movilidad del futuro, no obstante es una de las pioneras en esta tecnología, en la que comenzó hace más de 30 años apostando por el hidrógeno como agente energético. El primer representante de esta tecnología aperció en el año 2006 con el BMW Hydrogen 7, pero el salto más importante lo experimentarán a partir de este momento, pues BMW trabaja en el desarrollo de la tecnología de pila de combustible y todos sus componentes junto con Toyota desde el año 2013, y no olvidemos que Toyota es todo un especialista en este segmento, pues puede presumir de vender un vehículo con esta tecnología, el Toyota Mirai.
En alianza con Toyota
BMW sigue evolucionando su BMW Serie 5 Gran Turismo, un prototipo que cuenta con un propulsor eléctrico que desarrolla una potencia de 245 CV y se alimenta gracias a una batería de ión litio. Esta batería se recarga gracias a una pila de combustible que ya está realizada en cooperación con Toyota y que se alimenta con el hidrógeno que se acumula en un depósito que va ubicado entre sus dos ejes. Es capaz de acumular el hidrógeno criogenizado a una presión de 350 bar, consiguiendo así una autonomía superior a los 500 kilómetros, mientras que su proceso de recarga apenas dura cinco minutos.
Pero además de utilizarse como mecánica principal, BMW también trabaja para que esta mecánica de hidrógeno sea utilizada como un propulsor adicional a los actuales TwinPower Turbo, como en el caso de este BMW i8 experimental del que por ahora no tenemos información alguna.