Según el Reglamento General de Circulación (artículo 115), está prohibido usar el móvil en una gasolinera, y no solo supone un riesgo, sino que además está sancionado. Por lo tanto, en ningún caso debemos utilizar el móvil mientras repostamos combustible.
Existe la posibilidad de que pueda producirse algún incidente, pero desde hace tiempo se plantean sólidas dudas sobre el riesgo real de que llegue a darse, por ejemplo, una deflagración.
3Cuando lo teléfonos móviles no eran estancos
De esto los bomberos saben mucho, prácticamente lo conocen todo, les va la vida en ello. El usuario de TikTok, RubenBlackMountain, que, además de atrevido por internarse en el interminable mundo de las redes sociales, es bombero, a modo de advertencia expone su experiencia.
“El número de gasolineras que explotan por culpa de los teléfonos móviles es el mismo que el de mis encuentros sexuales en los últimos meses: cero”, ironiza el tiktoker; a lo que añade una pregunta que casi se responde sola: “Si no, dime: ¿Cuántas has visto explotar por los móviles? ¿Cuántas, a ver?”. Y como la respuesta es negativa -ninguna- lanza la pregunta que siembra la eterna duda: “Entonces, ¿por qué encontramos la señal de prohibido el uso del móvil en gasolineras? ¿A qué es debido?”.
Como un rayo se responde a sí mismo. Analepsis incluida. “Para explicar esto nos tenemos que ir unos años atrás, cuando los teléfonos móviles eran analógicos y tenían botones físicos”, explica el bombero, a punto de hilar los viejos teléfonos-ladrillo con explosiones flamígeras. “Los combustibles líquidos liberas gases muy inflamables y todos sabemos que haría falta una pequeña fuente de ignición para que esto se incendiara”, deja caer.