La historia de Brabus está plagada de productos apasionantes que, en alguna ocasión , incluso han superado límites que parecían insalvables. La compañía alemana, fundada en 1977, comenzó como un preparador especializado en Mercedes y, con el paso de los años, no sólo ha ampliado su portfolio de modelos y marcas de coches, sino que se ha introducido en el mundo de las motocicletas, la aviación o la náutica, entre otros. Eso sin olvidar su departamento de restauración y venta de clásicos, por el que en Motor16 sentimos absoluta devoción.
Ahora bien, pocas de sus obras nos han impresionado tanto como el Brabus Big Boy 1200. Desde luego su denominación por sí sola no da demasiadas pistas, aunque una vez descubierto te das cuenta de que podría haberse llamado de cualquier manera, pues nos resulta imposible de clasificar. Se trata de una autocaravana concebida por Brabus sobre un camión Mercedes Actros de 12 metros de largo, dos y medio de ancho y 4 de alto, que gracias a su carrocería de aluminio pintada en negro, tiene un perfecto camuflaje para la noche.
El Brabus Big Boy 1200 ofrece más de 30 metros cuadrados de espacio habitable con un refinamiento que, en algunos rincones, recuerda a la habitación de un hotel de lujo. Y, como si su tamaño no fuera ya motivo de conversación, cuatro módulos deslizables accionados eléctricamente amplían aún más la zona de estar cuando está aparcado, con gatos hidráulicos que garantizan la estabilidad.
El Brabus Big Boy 1200 es el autocaravana que todo supervillano querría tener
Al acceder al interior por una escalera accionada eléctricamente, se encuentra una lujosa sala de estar que desemboca en un dormitorio que mide 4,5 metros de ancho. Las plazas para dormir incluyen una cama doble, dos sofás y una cama individual adicional sobre la cabina. Es decir, que hay espacio suficiente tanto para el supervillano de turno como para parte de su séquito.
Uno de espacios más cuidados del Brabus Big Boy 1200 es el baño, cubierto de baldosas de piedra natural y con unas terminaciones que sólo se encuentran en hoteles de lujo. También hay una cocina equipada con todo tipo de electrodomésticos de alta gama: vitrocerámica, horno, lavavajillas, frigorífico, congelador, cafetera… e incluso un enfriador de vinos. Cerca se encuentra una sala de estar multifuncional, que puede funcionar de comedor o de oficina.
Por supuesto, el Brabus Big Boy 1200 de Brabus está a la última en conectividad, para lo cual está equipada con una antena parabólica Starlink que proporciona conexión a internet de alta velocidad en cualquier parte del planeta. El interior también incluye un par de televisores 4K de 43 pulgadas, un sistema de sonido de alta gama y una consola PlayStation 5 para los momentos de ocio.
Un total de ocho paneles solares montados en el techo, un gran paquete de baterías y un generador garantizan que los ocupantes tendrán suficiente energía para permanecer fuera de la red durante períodos prolongados. Asimismo, la autocaravana está equipada con grandes tanques para agua dulce y residual.
El Big Boy 1200 es el Brabus más lento de la historia
Toda esta carrocería de tipo sándwich está montada sobre un chasis de tres ejes, los dos traseros de doble rueda. La potencia proviene de un enorme motor turbodiésel de 12,8 litros que desarrolla 523 CV y 2.600 Nm de par. Esta última cifra seguramente sea la más elevada que jamás haya figurado en la ficha técnica de un Brabus, aunque como contrapartida, también es de record (negativo) su velocidad máxima, que está limitada electrónicamente a 90 kilómetros por hora.
Cabe reseñar que es el Brabus Big Boy 1200 es el primero de una serie planificada de vehículos recreativos Brabus Masterpiece de gran tamaño, desarrollados en asociación con la empresa belga STX Motorhomes. Se fabrica bajo pedido a partir de 1.260.504 euros, antes de impuestos.
Por otro lado, no creemos que haga falta señalar que el carnet B no sirve para conducir semejante mole de 26 toneladas de peso, de modo que o cuentas con el permiso de categoría C… o deberás buscarte un chófer.