Antes de que Bugatti pasara a formar parte del Grupo Volkswagen, la compañía de Molsheim tuvo un breve período, allá por la década de los años '90, bajo el control de Romano Artioli. En aquellos prometedores años para la compañía salieron de la artesanal factoría de Campogalliano en Italia los sensacionales Bugatti EB 110, además del sublime Bugatti EB 112 Concept, un rara avis que debía adelantar una rápida y exclusiva berlina para la compañía.
Quizá la razón de porqué este Bugatti EB 112 es menos conocido es porque Bugatti Automobili S.p.A. quebró poco después de que se iniciara su desarrollo, concretamente en 1995. Tanto es así que solo se conoce la existencia de tres prototipos funcionales, de los cuales, uno de ellos es este que tienes ante tus ojos y que tiene a la venta el concesionario Schaltkulisse en Alemania.
Diseñado por Giugiaro
El particular Bugatti EB 112 fue presentado por vez primera en el Salón de Ginebra de 1993. Se trató de un encargo personal de Romano Artioli al diseñador Giorgetto Giugiaro y a su equipo de Italdesign, a quien se le indicaron algunos apuntes para introducir elementos históricos en su diseño. Entre ellos se pueden apreciar detalles como la columna vertebral del Bugatti Type 57 SC Atlantic que recorre la carrocería de este EB 112, que también hereda zonas inspiradas en los Bugatti Type 55 y Type 32. Además sus llantas presentan un aspecto que recuerda a las enormes llantas utilizadas antaño por el Bugatti Royale.
Mientras tanto, bajo el gran capó delantero se esconde un poderoso 6.0 V12 con 60 válvulas y atmosférico, que estaba colocado en la posición idónea para ofrecer el mejor reparto de pesos posible. Se dice que este bloque, conectado a una transmisión manual de 5 velocidades y a su sistema de tracción a las cuatro ruedas, era capaz de entregar 456 CV de potencia y 650 Nm de par motor, permitiendo al EB 112 alcanzar los 300 km/h de velocidad punta y acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 4,3 segundos.
Con el número #39002
Según palabras de Artioli, esta enorme berlina de 5,07 metros se conducía como un kart y era más sencillo y divertido de conducir que un Bugatti EB 110 con motor central. Lamentablemente pocos pudieron probar la afirmación de Artioli, porque antes de la quiebra de la compañía solo se pudo completar la unidad de Italdesign.
Precisamente ellos fabricaron el EB 112 con el número de chasis #39001, mientras que los otros dos que se existen (#39002 y #39003) fueron iniciados en las instalaciones que Bugatti tenía en Campogalliano. Iniciados, porque fueron terminados de ensamblar por los especialistas de Monaco Racing Team, una empresa propiedad de Gildo Pallanca Pastor, quien adquirió diferentes activos de Bugatti tras su quiebra. Y dos de ellos fueron sendos EB 112 a medio hacer.
Este ejemplar que tienes ante tus ojos es el segundo de ellos, que dicen tan sólo ha tenido un único propietario en toda su vida, además de que en todo este tiempo apenas ha recorrido 4.000 kilómetros. Se encuentra en perfecto estado, además de que funciona a las mil maravillas, pero Schaltkulisse no ha desvelado su precio de venta. Pero puedes imaginar que como todos los Bugatti 'raros', no tiene pinta de ser barato.