El mercado de los vehículos eléctricos se ha convertido en un campo de batalla donde las marcas de automóviles compiten por la supremacía. En este emocionante enfrentamiento, Citroën, como parte de su estrategia para aumentar su cuota de mercado en Europa al 5%, ha decidido dar un golpe audaz para ganar terreno frente a dos de sus principales competidores chinos: el BYD Dolphin y el MG4 Electric.
Lo más sorprendente es que el vehículo de Citroën se fabrica en España, en la planta de Stellantis en Villaverde (Madrid). A lo largo de las próximas líneas analizaremos cómo este modelo eléctrico de Citroën se enfrenta a sus competidores asiáticos y por qué está ganando notoriedad en el competitivo mundo de la movilidad eléctrica.
2Una marcada reducción de precios
Uno de los movimientos más notables de Citroën es la reducción de precios en dos de sus modelos eléctricos: el ë-C4 y el ë-C4 X. Estos vehículos ahora son más accesibles que nunca en el mercado eléctrico. El crossover compacto ë-C4 tiene ahora un precio base de 33.405 euros antes de aplicar las ayudas gubernamentales, mientras que el ë-C4 X, su variante sedán, se encuentra en 33.805 euros. Estos precios más bajos buscan hacer que los vehículos eléctricos de Citroën sean una opción atractiva para un público más amplio.