Coger el coche por la mañana, cuando ha estado expuesto a temperaturas bajo cero toda la noche, no es una sensación nada agradable. Ese frío invernal metido dentro del habitáculo del coche y el volante absolutamente congelado, no es una situación que invite a quitarse el abrigo antes de arrancar.
Por mucho que encientas la calefacción nada más encender el motor, el sistema no va a empezar a calentar hasta pasados unos minutos. Por eso muchos conductores se montan en el coche con el abrigo y los guantes puestos. Esta no es la situación idónea y ese exceso de abrigo, puede provocar hasta una multa de la DGT. Para hacer más liviano y seguro este trance invernal te traemos el mejor método para calentar tu coche en invierno.
1Orienta el aire caliente hacia la luna para que se descongele antes
No es nada cómodo conducir cuando estás muerto de frío y tienes las manos congeladas. Si tienes la suerte de tener una plaza de garaje no padecerás el frío tan extremo que cala en un coche tras pasar toda la noche a la intemperie. Además de evitarse la tediosa tarea matutina de quitar la escarcha del parabrisas.
Muchos conductores sí tienen que padecer los estragos que las gélidas temperaturas causan en sus coches. Empezando por esa aburrida labor de descongelar la luna. Si es tu caso, te recomendamos que antes de quitar el hielo arranques el motor de coche y ponga la calefacción orientando el aire hacia la luna. Cuando empiece a calentar, la temperatura del interior te ayudará a deshacer el hielo que se acumula en el cristal. Aunque en esos primeros momentos el aire todavía no sea muy caliente.
