El calor extremo del verano no solo afecta nuestro bienestar físico, sino que también puede tener serias repercusiones en el funcionamiento de nuestros vehículos. Con temperaturas que a menudo superan los 30 grados centígrados, es crucial estar atentos a cómo el calor puede dañar componentes esenciales del coche, desde los frenos hasta los líquidos del motor. En este artículo, exploraremos cómo el calor afecta a diferentes partes de tu vehículo y qué medidas puedes tomar para evitar daños y garantizar un viaje seguro.
3El motor
El motor de tu coche está especialmente vulnerable al calor extremo. Si el electroventilador y el termostato no funcionan correctamente, el motor puede sobrecalentarse rápidamente. El aceite del motor también se evapora más rápido a altas temperaturas, lo que puede reducir su capacidad para lubricar y proteger los componentes del motor.
Para proteger el motor, es crucial revisar y mantener en buen estado el sistema de refrigeración, incluyendo las correas y el radiador. Además, es recomendable verificar regularmente el nivel y la calidad del líquido refrigerante y del aceite del motor para asegurarse de que están en niveles óptimos y no han perdido sus propiedades.