La nueva normativa europea sobre permisos de conducción empieza a tomar forma. La Comisión Europea acaba de avanzar los primeros detalles de su propuesta, con la que Bruselas pretende modernizar los carnés de conducir en el territorio de la Unión. La nueva norma incluirá, entre otras cosas, un carné digital válido en todos los estados miembros o la posibilidad de que los jóvenes de 17 años puedan hacer las pruebas para obtener el permiso y empezar a conducir un vehículo acompañados de un adulto, una opción que ya existe en países como Alemania o Austria.
Solo el año pasado perdieron la vida más de 20.000 vidas en las carreteras de la UE y la mayoría de las víctimas fueron usuarios vulnerables: peatones, ciclistas y usuarios de scooters y motocicletas. Por eso, la propuesta de la Comisión, que tendrá que someterse al visto bueno del Parlamento Europeo y el Consejo, se propone mejorar la seguridad vial en Europa para lograr lo que denominan ‘Visión Cero’: que no haya víctimas de accidentes de tráfico en 2050.
Carné de conducir a los 17 años
La preparación de los conductores para cumplir estos objetivos es prioritaria, ya que, según la Comisión «múltiples estudios han demostrado que la falta de experiencia al volante se traduce en una mayor probabilidad de verse involucrado en accidentes». En este sentido, los jóvenes representan el 8 por ciento de los conductores, pero suponen el 16 por ciento de los conductores muertos en accidente, y 2 de cada 5 colisiones mortales involucran a un conductor o pasajero joven (menor de 30 años). A la vista de estas cifras, una de las propuestas de la Comisión es que los conductores jóvenes adquieran experiencia al volante a través de la conducción acompañada a partir de los 17 años.
Los jóvenes podrán realizar su examen de conducir a partir de los 17 años, pero no estarán autorizados a conducir solos antes de los 18 años. Este sistema ya existe para las licencias de categoría B en algunos estados miembros (por ejemplo, Alemania, Austria). La Comisión también pretende que se aplique a las licencias de categoría C (camiones) para facilitar el acceso a la conducción profesional «lo que ayudará, con el tiempo, a aliviar la escasez de conductores profesionales, sin comprometer la seguridad vial», explican.
Permiso digital: adiós al plástico
La propuesta de la Comisión introduce por primera vez un carné de conducir digital (en España ya se puede llevar con validez gracias a la app miDGT), accesible a través de un teléfono móvil u otro dispositivo digital, que sería reconocido en toda la UE. Esto facilitará la realización de trámites administrativos y la renovación o canje del permiso de conducción, ya que será posible realizar el trámite completamente online.
La Comisión prevé poner en marcha esta media en un plazo de 18 meses después de que se apruebe la Directiva y los conductores podrían disponer de su carné digital a partir de los cuatro años posteriores a la fecha de adopción de la norma.
Multas que traspasan fronteras
Según datos de 2019, último año del que se dispone de cifras con detalle, se detectaron unas 14,5 millones de infracciones de tráfico cometidas con un vehículo matriculado en la un país diferente del que se produjo la infracción por un conductor no identificado en el acto. Unos 8,2 millones de multas terminaron pagándose, pero 6,3 millones quedaron impunes, lo que supone un 40% de las infracciones.
Una lacra con la que quiere acabar Bruselas con su nueva Directiva, que introduce medidas para agilizar los procedimientos entre los estados. Por ejemplo, si has perdido todos los puntos del carné de conducir en España no podrás conducir en ninguno de los países de la UE.
Se amplía el número de sanciones
Más allá de los clásicos excesos de velocidad o embriaguez, la Comisión propone ampliar las infracciones graves a otras conductas que atentan contra la seguridad vial, como no mantener la distancia suficiente con el vehículo delantero, adelantamientos o estacionamientos peligrosos, no respetar los pasos de peatones, conducir en sentido contrario, etc… Muchas de ellas ya tienen la consideración de infracción grave o muy grave en nuestro país.
Además, otra de las propuestas de la Directiva garantizará la igualdad de trato de los infractores ya sean residentes o no residentes.
Otras medidas
Otro de los cambios en los exámenes de los carnés de conducir que propone la Comisión es adaptar la formación y las pruebas de los conductores para prepararlos mejor ante la presencia de usuarios vulnerables en la carretera. Esto ayudará a incrementar la seguridad de los peatones, los ciclistas y los usuarios de scooters y bicicletas eléctricas a medida que la UE transita hacia una movilidad urbana más sostenible.
También se introducirá en toda Europa la tasa 0 de alcohol que en España ya está vigente y se establecerá un período de prueba obligatorio de un mínimo de dos años para los conductores noveles. Además, se adaptarán los exámenes de conducir a los vehículos cero emisiones y los sistemas avanzados de asistencia a la conducción. Por otro lado, los reconocimientos médicos incluirán una evaluación más específica de la aptitud física de los conductores -no solo fijándose en la edad-, y se tendrán en cuenta los avances en el tratamiento médico de enfermedades como la diabetes.
